- Instancia de jefes de bloque no incluye su discusión y aprobación en las dos sesiones ordinarias que se realizan martes y jueves.
- Se propondrá seguramente la aprobación de urgencia nacional, porque tiene que se discutido para su aprobación o improbación antes del 30 de noviembre.
La reunión de la Instancia de Jefes de Bloque del Congreso de la República, no se incluyó este lunes la discusión del Presupuesto´2025, en lo que parece una estrategia para que sea introducida a último momento en alguna de las sesiones programadas –martes o jueves– para ser aprobado con carácter de «urgencia nacional», dados los acuerdos que hay entre las bancadas.
El Congreso inicia así una de las semanas más decisivas del año político. El Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado 2025 deberá discutirse en el pleno, en medio de un ambiente de negociaciones intensas, una nueva Junta Directiva recién instalada y señales claras de que los votos para aprobarlo ya están prácticamente amarrados.
¿Qué está en juego?
El proyecto enviado por el Ejecutivo supera los Q163 mil millones y es la principal herramienta financiera del presidente Bernardo Arévalo para su segundo año de gobierno. Su aprobación no solo define prioridades de gasto, sino que también refleja el equilibrio de poder entre el oficialismo y los bloques que negociaron la Junta Directiva.

En las últimas semanas, las sesiones parlamentarias han estado marcadas por la elección de la nueva Junta Directiva, que reunió más de 140 votos y armó una mayoría inusual; acuerdos entre Aliados, UNE, VIVA, Vamos, Semilla; y varios bloques pequeños que normalmente no votan juntos; negociaciones con el Ejecutivo.

Ese bloque amplio —aunque heterogéneo y temporal— es justamente la señal más fuerte de que el Presupuesto tiene camino libre.
Declaraciones del Ministro de Finanzas
Según declaraciones publicadas hoy por la AGN (Agencia Guatemalteca de Noticias), el ministro de Finanzas Públicas enfatizó que se trata de un Presupuesto «responsable y orientado al desarrollo, que permitirá al gobierno cumplir metas sociales y atender compromisos pendientes”, pero lo criticos señalan que para lograr la aprobación se han dado concesiones bajo la mesa para los diputados.
¿Hay votos para aprobarlo?
Todo indica que sí.
La elección de la nueva Junta Directiva fue una demostración de fuerza:
más de 140 votos de 160 diputados.
Esa votación, inusual y prácticamente inédita, fue interpretada dentro y fuera del Congreso como parte de un paquete de negociaciones que incluía la Junta directiva, una breve agenda para el fin de año y, especialmente, la aprobación del Presupuesto 2025
La lectura más extendida en los pasillos legislativos es que el acuerdo ya está cerrado y que la discusión de mañana será más formal que sustantiva. Habrá algunos reclamos y reservas, pero los votos ya están alineados.
Las razones por las que no se incluyó de manera formal en la agenda de hoy por parte de la instancia de jefes de bloque, es porque ha trascendido que bloques minoritarios piden resdistribución de recursos para obras municipales, mientras que otros quieren modificaciones que les favorezcan en cuanto a la contratación de obra pública.
Si el presupuesto se aprueba mañana —como todo indica— el Ejecutivo tendrá margen operativo para 2025, pero deberá lidiar con la ejecución, un segundo reto que históricamente ha frenado la capacidad del Estado para cumplir metas de inversión.
Por potra parte, tendrá criticas por haber recurrido a prácticas del pasado, que han sido calificadas siempre de corrupción y tráfico de influencias.
El país entra así en una semana crucial:
la aprobación del Presupuesto marcará el tono político del próximo año y será una prueba temprana del alcance real de la alianza legislativa que apoyó la nueva Junta Directiva.
