(Que se tapan con el mismo poncho o manta, todos juntos, protegidos todos igualito…)
La Red
Crispino Picón Rojas
Estamos de vuelta con LaRed, que se alimenta con la información de mis colegas meseros, sobre todo, aquellos que atienden en restaurantes de pomada, en casas de políticos, funcionarios, y hasta le dan la mano a un monarca venido a menos, el tristemente célebre Rey del Tenis, Roberto López Villatoro, el mejor abogado tejedor, hasta hace poco maestro para decidir a quien si y a quien no se le daban bien las cosas tribunales.
Ahora si hay un montón de información acumulada, porque recuerden que me fui de vacaciones desde finales de diciembre y entonces no publiqué todos los chambres de Nochebuena y Año Nuevo, cuando los cuates sueltan la sopa. Y déjeme decirles que el brindis de despedida de año estuvo cargado de nostalgia en muchos lugares, principalmente en las casas de diputados, las fiestas de los politiqueros y todos los muchachones que ya no ven las mismas posibilidades de business que había antes.
Bueno, entre ese montón de cosas que me enteré, es que el intocable –aun no le caen con todo–, Rey del Tenis, levantó su copa a fines de año con un grupo de abogados con los que pensaba (aun lo pensará???) copar la elección del Colegio de Abogados, y les aseguró que nuestros amigazos del Congreso no permitirán que se excluya a los nobles litigantes de las comisiones de postulación con la reforma constitucional. Si pasa –sentenció–, ¡será sin eso!.
Pero era 2016, y casi al mismo tiempo Thelma Aldana despedía a Iván Velázquez en su viaje de vacaciones, y con optimismo se deseaban Feliz Año, con la promesa de volver con más ganas, y arremeter contra las mafias. Pero ya para entonces sabían que El Rey del Tenis tenía muchas reuniones raras, incluso con algunos reos VIP, abogados, diputados, jueces y magistrados, y andaba con su promesa de poner en su lugar a los extranjeros entrometidos.
No perdieron el tiempo de las vacaciones. Pidieron acelerar investigaciones, y asumir aquello de que el que pega primero, pega dos veces. Dieron ya el primer golpe, pero nadie está KO todavía.
Uno que pasó buenas fiestas de fin de año fue Arnoldo Medrano, precisamente porque funcionó para él el marco de impunidad creado para la clase política. Por escuchas telefónicas se supo que el ex alcalde supo la resolución del juez que le dio medida sustitutiva 48 horas antes que se hiciera público.
Así funcionan las cosas. La ¡chamarra!, esa que fueron tejiendo paso a paso los politiqueros de turno, y que sirve para tapar a funcionarios, jueces, magistrados, y empresarios y hasta narcos y otras mafias –siempre que paguen–, sirve para el frío, aunque el que se les vino ahora parece más fuerte, de acuerdo con el Insivumeh.
En fin, el análisis del MP y la CICIG, es que este año tratarán de parchar la chamarra y por ello la importancia de empezar –porque esto es solo la punta del iceberg–, con la cuestionada magistrada Marta Stalling, que metió la pata al pedirle al juez Carlos Ruano que favoreciera a su hijito Otto Fernando Molina Stalling –hasta el cuello en el caso bufete de la impunidad–. Según las investigaciones, Stalling ha sido siempre un alfil de la clase política.
Por cierto, el juez Ruano se las peló del país, pero más por concejo de las fiscalías, porque temen que alguien quiera mandar un mensaje grueso y decidiera quitarlo del camino para que no sea más sapo. La prueba principal, el audio comprometedor, ya está en buen resguardo.
El que está preocupado por el largo y calidad de la chamarra es el simpático Jimmy Morales, a quien le han hecho creer sus asesores del Army que todo marcha sobre ruedas, menos el caso de su hijo José Manuel. Por eso lo de alargar un poco la cobertura, para que el caso no llegue a más. Ya veremos lo que pasa.
El pobre presi tendrá hoy por la noche un purrún de celebración, pero será íntimo, para no darse mucho color. Eso si, el que no brinde por los grandes y maravillosos logros del Gobierno, no tendrá cobertura de la chamarra que va quedando.
Según cuentan, la que no celebró mucho las fiestas de fin de año por la depre, fue la Roxana Baldetti, quien se puso como mil diablos porque sus hijos siguen subiendo fotos a internet en la que se les mira disfrutando de playas y fiestas, mientras ella no encuentra chamarra que le cubra, después de todos los clavos y robos que le han descubierto. Un fiscal de la CICIG dice que fue tan mala escondiendo la corrupción, que piensa que cuando era chiquita y jugaba chíbiri cuarta, la encontraban siempre primero.
Donde si parece estar perdiendo el pulso el dúo dinámico (Thelma e Iván) es con el magnate de la tele, Ángel González, quien ya empieza a recibir publicidad del Gobierno, sigue con sus malas prácticas empresariales, y sigue prometiendo a sus cuates que él es el único capaz de parchar la chamarra, y darles protección –como ha hecho desde 1986–, a los gobernantes de turno y toda su mara…
Bueno, no me queda más que parar por hoy, porque tengo que ir al Congreso para reír un poco con el discurso del simpático…por algo le dicen el hombre en la Luna.
¡Ah! Eso si, póngale coco a lo que está por venir, porque es el gran duelo: unos para parchar y usar la chamarra, y otros para destapar a los que la usan.