La otrora Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), el partido de la extinta guerrilla homónima, oficializó su cambio de nombre, que pasará a conocerse a partir de ahora por Comunes, después de la celebración este fin de semana de su II Asamblea Extraordinaria.
Uno de los primeros en hacerlo oficial fue el líder del partido, Rodrigo Londoño, también conocido como ‘Timochenko, quien días antes reconoció que «en la práctica» utilizar las mismas siglas de la ya disuelta guerrilla no fue la opción «más acertada».
«A partir de hoy nuestro partido adoptara el nombre de Comunes», celebró ‘Timochenko’, quien señaló también que la decisión se produjo tras un «debate democrático» en el que también se acordó mantener el emblema de la rosa como símbolo del partido.
«Ser Comunes es dar un paso más hacia la lucha por la implantación del Acuerdo de Paz, es un paso más hacia la reconciliación, el diálogo y la esperanza por ver un mejor país», publicó en Twitter la senadora, Griselda Lobo, alias ‘Sandra Ramírez’.
Lobo también ha sido una de las voces destacadas del partido que en la víspera de la celebración de la asamblea este fin de semana habló de la necesidad de reconfigurar la identidad de Comunes a través de un cambio de nombre, puesto que FARC «tiene una carga negativa y ha sido duramente estigmatizado».
La propuesta de los disidentes
El cambio de nombre no es un tema baladí, especialmente después de que en el último año, un grupo de antiguos firmantes de la paz, entre ellos Luciano Marín Arango, alias ‘Iván Marquez’ decidiera abandonar la vía parlamentaria y retomar nuevamente las armas, junto a otros como Seuxis Pausias Hernández, alias ‘Jesús Santrich’.
Se presume que con Comunes el partido podrá desligarse de su pasado armado y en especial de las actuales disidencias de las FARC, las cuales no han renunciado a las siglas.
Fue precisamente ‘Iván Marquez’ y sus partidarios dentro del partido los que terminaron consiguiendo en el primer congreso fundacional en 2017 que el acrónimo FARC se mantuviera.
La disputa se extendió también en el plano ideológico, mientras Londoño y Jorge Torres, alias ‘Pablo Catatumbo’, Julián Gallo, conocido como ‘Carlos Antonio Lozada’, y Pastor Alepe, abogaron por tomar un rumbo hacia la socialdemocracia, ‘Iván Márquez’ y los suyos insistían en mantener las raíces marxistas de la guerrilla.