¿Cómo erradicó Inglaterra la violencia en el futbol?

  • Luego de la vergüenza que se vivió a mitad de semana en Buenos Aires con la demencial violencia en el marco de la Copa Sudamericana, es importante recordar como Inglaterra erradicó la violencia en el fútbol.

La violencia cuando se jugaba el partido entre Independiente y la U de Chile dejó imágenes dramáticas que pousieron la voz de alerta sobre el papel de las barras bravas.

La erradicación de la violencia en Inglaterra fue producto de tragedias que obligaron a actuar, de la voluntad política de la Primera Ministra Margaret Thatcher, del Informe Taylor (1990) como hoja de ruta, y de la profesionalización de la Premier League. Inglaterra transformó sus estadios en lugares seguros, y su modelo es replicado en otras ligas del mundo.

El auge del “hooliganismo”

Desde los años 60 y 70, los grupos de hooligans comenzaron a vincularse con los clubes ingleses, generando peleas organizadas dentro y fuera de los estadios.

La situación alcanzó niveles críticos en los 80, con violencia masiva, destrucción de instalaciones y choques con la policía.

Crisis y tragedias que marcaron un cambio

Heysel (1985): Final de la Copa de Europa entre Liverpool y Juventus en Bruselas. Un derrumbe causado por avalanchas tras disturbios dejó 39 muertos.

Hillsborough (1989): En una semifinal de FA Cup entre Liverpool y Nottingham Forest, la mala organización y el sobrecupo provocaron una avalancha que causó 97 fallecidos. Estas tragedias forzaron al Estado y a la FA (Football Association) a tomar medidas drásticas.

Imagen dramática en el estadio Libertadores de América de Buenos Aires, Argentina.

Medidas tomadas para erradicar la violencia

Informe Taylor (1990):

Investigación oficial tras Hillsborough, liderada por Lord Justice Taylor. Recomendó eliminar las gradas de pie y transformar los estadios en “all-seater stadiums” (sólo con asientos).

Sugirió mejorar accesos, salidas de emergencia y seguridad en infraestructura.

Sanciones severas contra hooligans:

Margaret Thatcher, Primera Ministra (1979–1990), impulsó leyes más estrictas. Se implementaron “Football Banning Orders”, prohibiciones judiciales para asistir a partidos.

Mayor presencia policial dentro y fuera de los estadios.

Exclusión de torneos europeos (1985–1990):

Tras Heysel, todos los clubes ingleses fueron vetados de competiciones UEFA durante 5 años (Liverpool por 6). Esto obligó a los clubes a mejorar su imagen y colaborar con las autoridades.

Cámaras de seguridad (CCTV):

Instaladas en los estadios durante los 90 para identificar a violentos. Creación de bases de datos compartidas entre clubes, policía y tribunales.

Modernización de estadios:

Con la llegada de la Premier League en 1992, se impulsó un modelo de espectáculo familiar y seguro.

Los clubes invirtieron en nuevas instalaciones con asientos numerados, controles de acceso electrónico y mejores servicios.

Resultados

En los 2000, Inglaterra pasó de ser considerada la “capital del hooliganismo” a un ejemplo mundial en seguridad deportiva.

La violencia no desapareció del todo, pero se desplazó fuera de los estadios y se redujo significativamente. Hoy, la Premier League es uno de los entornos más seguros para el aficionado.

La erradicación de la violencia en Inglaterra fue producto de tragedias que obligaron a actuar, de la voluntad política de Thatcher, del Informe Taylor (1990) como hoja de ruta, y de la profesionalización de la Premier League. Inglaterra transformó sus estadios en lugares seguros, y su modelo es replicado en otras ligas del mundo.

La violencia no ha sido totalmente erradicada pero se redujo drásticamente por las medidas tomadas en los años 80.

La actualidad

Inglaterra ya no vive la violencia extrema de los años 70 y 80, todavía se aplican medidas modernas y estrictas para mantener bajo control a los grupos violentos. Aquí te detallo las más importantes en la actualidad:

Medidas actuales contra los grupos violentos en Inglaterra

1. Football Banning Orders (FBO) – Órdenes de prohibición

Son sanciones judiciales que pueden durar de 3 a 10 años. Impiden asistir a partidos de fútbol en Inglaterra y Gales.

También pueden obligar al aficionado sancionado a entregar su pasaporte cuando juega Inglaterra en el extranjero, para evitar viajes violentos. Hoy hay miles de aficionados registrados bajo este régimen.

2. CCTV y reconocimiento facial

Todos los estadios de la Premier y Championship tienen cámaras de alta definición. Se usan programas de reconocimiento facial para identificar a personas con antecedentes violentos.

Los clubes comparten bases de datos con la policía y la FA.

3. Policía especializada en fútbol

Existe la UK Football Policing Unit, encargada de coordinar la seguridad de los partidos.

Trabaja con spotters (policías de paisano infiltrados en grupos de hinchas) para detectar líderes de violencia antes de que actúen.

4. Controles estrictos en los estadios

Revisiones de entrada muy detalladas (cacheos, detectores de metales). Entrada solo con boleto electrónico y asiento numerado. Prohibición estricta de alcohol en las gradas (solo se vende en áreas designadas).

5. Cooperación internacional

Inglaterra trabaja con la UEFA y la Interpol para vigilar desplazamientos de hinchas en torneos europeos y mundiales.

Los hooligans fichados tienen restricciones de viaje.

6. Campañas sociales y clubes responsables

Programas de inclusión juvenil para evitar que jóvenes se integren a grupos violentos.

Campañas de la Premier League y la FA contra el racismo y la discriminación (que a menudo iban ligados a la violencia).

Gracias a estas medidas, los estadios en Inglaterra son de los más seguros del mundo. La violencia no desapareció del todo, pero hoy se da fuera de los estadios o en encuentros clandestinos, muy lejos de la imagen que tenía el fútbol inglés en los 80.