Manchester City y Borussia Mönchengladbach también jugarán el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones en el Puskás Aréna de Budapest (Hungría), feudo que ya acogió el duelo de ida que terminó con 0-2 a favor del City, que ahora ejercerá de anfitrión.
Según confirmó la UEFA, la medida tomada por las autoridades alemanas de obligar a hacer una cuarentena de diez días a quien proceda de Gran Bretaña obliga a cambiar la sede y a no poder jugar en el Etihad Stadium, sede de los ‘citizen’.
El equipo de Guardiola, que defiende ese 0-2 de la ida, ejercerá ahora de anfitrión y no de visitante en el mismo estadio en el que el miércoles 24 de febrero superaron a los alemanes, que salen ‘ganando’ al volver a jugar en terreno neutral y no en casa del Cirt.
Gran Bretaña se considera un área de riesgo particular para la cepa de coronavirus más contagiosa identificada por primera vez en la región. En caso de un viaje a Gran Bretaña, los equipos alemanes tendrían que estar en cuarentena a su regreso.