Cientos de personas se han concentrado cortando el tráfico a las puertas del estadio Camp Nou pocas horas antes del clásico liguero entre el Barcelona y el Real Madrid, tras la llamada de la plataforma independentista catalana Tsunami Democrático.
La plataforma tiene previsto llevar a cabo una acción dentro del estadio con su lema «Spain, sit and talk (España, siéntate y dialoga)», un llamado que busca el diálogo entre el gobierno central y las autoridades regionales independentistas.
Para ello, en un mensaje, esta plataforma anónima ha recordado que «para realizar la acción de Tsunami Democrático es imprescindible que el partido se pueda disputar y la afición con entrada y carné pueda entrar al estadio».
La plataforma avisa así a los cientos de personas que desde las 16:00 horas local se han concentrado en torno al estadio barcelonista, que no impida la llegada de los equipos ni de los aficionados.
Estos manifestantes, ondeando banderas independentistas catalanas, cortaron en medio de una ambiente festivo las calles adyacentes al estadio, bajo la mirada de cientos de policías, que forman parte del fuerte dispositivo de seguridad que desde la mañana blinda los alrededores del estadio barcelonista.
Mostrando pancartas azules en las que se puede leer el lema de Tsunami Democrático junto a la leyenda «Libertad, derechos, autodeterminación», los manifestantes de todas las edades corean eslóganes independentistas.
«Esto se arregla con un referéndum (de autodeterminación). Si sale que no (a la independencia) nos callamos, y si sale sí… Pero no lo van a hacer porque saben que saldría el sí», dice a la AFP el economista jubilado de 68 años, Emilio Díez, repartiendo las pequeñas pancartas con el lema de Tsunami.
«Hay que aprovechar la magnitud de este partido para que el mundo vea nuestra situación desde Europa y desde el mundo», afirma, por su parte, Antoni Rabull, un jubilado de 73 años.
Rabull reconoce, no obstante, que «vamos un poco perdidos», porque ni siquiera los manifestantes tienen muy claro cual será la acción sorpresa prevista, «aunque creo que el partido se podrá jugar».
El clásico liguero, en el que los dos grandes del fútbol español se juegan el liderato, comenzará a las 19 horas local.