Pekín bajará los aranceles a la importación de más de 850 productos, incluyendo el cerdo congelado, a partir del próximo mes, indicó el Ministerio de Finanzas este lunes, en un intento de combatir la escasez de ese alimento básico en el país.
La industria porcina de China se vio afectada duramente por la peste porcina africana, que obligó a sacrificar más de un millón de animales, según estadísticas oficiales, y provocó que el precio del cerdo se duplicara.
Según el anuncio de este lunes, las aranceles al cerdo congelado caerán de un 12% a un 8% a partir del 1 de enero.
La medida no parece estar relacionada con la guerra comercial abierta entre China y Estados Unidos, que llevó a ambos países a aumentar los aranceles de varios productos, cubriendo cientos de billones de dólares, lo que lastró el crecimiento mundial.
Sin embargo, el presidente estadounidense, Donald Trump, retuiteó dos informes de prensa sobre la reducción de esos aranceles este lunes, sin hacer ningún comentario. La lista de productos afectados incluye varios productos que las compañías chinas compran a Estados Unidos, como el cerdo y aparatos electrónicos.
Según los analistas, con esta decisión, Pekín desearía dar signos de una cierta apertura tras haber alcanzado un acuerdo de mínimos con Estados Unidos este mes para reducir algunas tasas y trabajar hacia un pacto más amplio.
La Comisión de Aranceles del Consejo de Estado afirmó en un comunicado que los cambios optimizarán «la estructura comercial y promoverán un desarrollo de alta calidad de la economía».
También se bajarán los aranceles de otros productos alimentarios como el pescado, queso y frutos secos y de productos farmacéuticos, componentes para teléfonos inteligentes y varios productos químicos.
Además, los productos importados de países como Nueva Zelanda, Perú, Costa Rica, Suiza, Islandia, Australia, Corea del Sur y Pakistán también serán sometidos a una reducción arancelaria, según el comunicado del ministerio.