La mezzosoprano alemana Christa Ludwig falleció el sábado a la edad de 93 años en su hogar adoptivo de Klosterneuburg, cerca de Viena, según confirmó este domingo su familia a la agencia de noticias austriaca APA.
Ludwig fue considerada una de las grandes estrellas de la ópera del siglo XX. En 2018 recibió el premio Opus-Klassik por su trayectoria.
Sus cualidades vocales la distinguían por su elegancia en el fraseo, por la belleza de su inconfundible timbre y por su soberbia capacidad para asimilar diferentes géneros y estilos, ya que cultivó con igual dominio tanto la ópera como la música sinfónica y el ‘Lied’ alemán.
Intérprete inquieta y de una gran cultura, sentó cátedra al asumir y dar vida a las principales obras para su cuerda de Beethoven, Richard Strauss o Wagner, pero también fue una grande en Verdi o Berlioz,
De Berlín
Oriunda de Berlín, Ludwig celebró su despedida de los escenarios en 1994, tras 769 representaciones en la Ópera Estatal de Viena.
Ludwig debutó en 1946 como el Príncipe Orlofsky en «El murciélago» en Fráncfort. Tras pasar por teatros de Darmstadt y Hannover, llegó a la Ópera Estatal de Viena en 1955, donde interpretó un total de 43 papeles.
Desde su primera aparición en el Festival de Salzburgo en 1955, fue una asidua del evento, así como en el Festival Wagneriano de Bayreuth y en muchos otros festivales y auditorios importantes.