Un grupo de 500 caficultores se agruparon frente a la SAT para pedir que se detengan las intervenciones contra las empresas y que en vez de un impuesto superior al 5% se establezca uno del 5%. Las autoridades dialogaron con los inconformes a las afueras de la oficina tributaria.
El Superintendente Juan Francisco Solórzano Foppa, indicó a los manifestantes, que no es competencia de la SAT establecer la política fiscal, ni las cargas impositivas, que esa es una labor del Organismo Legislativo. Además, les informó que en el caso de las acciones realizadas en los diferentes casos, la SAT no tiene la facultad para detenerlas porque se estaría incumpliendo con lo establecido en la Ley.
La Ley Orgánica de la SAT establece entre sus obligaciones ejercer la administración del régimen tributario y aplicar la legislación tributaria, la recaudación, control y fiscalización de todos los tributos internos. También le compete controlar, promover y ejecutar las acciones administrativas y judiciales que sean necesarias para cobrar a los contribuyentes y responsables los tributos que adeuden, sus intereses, recargos y multas.
La Asociación Nacional del Café (Anacafé) manifestó a través de un comunidad que por la falta de mecanismos institucionales que garanticen el acceso a estos recursos, los productores dependen de adelantos financieros facilitados por los compradores, tanto nacionales como extranjeros.