Un ataque lanzado por presuntos yihadistas contra un restaurante en Uagadugú, capital de Burkina Faso, el domingo por la noche dejó 18 muertos, afirmó este lunes el gobierno.
El «ataque terrorista» contra el restaurante Istanbul dejó asimismo una decena de heridos y dos asaltantes muertos, informó el ministro de Comunicación, Remis Dandjinou.
Se desconocía por el momento el número total de atacantes, aunque se mencionaron al menos dos que se movilizaban en una moto armados con fusiles kalachnikov y sobre las 21H00 (locales y GMT) dispararon sobre los comensales. Un camarero señaló a otros «tres hombres que llegaron en un 4×4 hacia las 21H30, descendieron del vehículo y comenzaron a disparar contra los clientes que se encontraban en la terraza».
El restaurante, ubicado en la importante avenida Kwame Kkrumah de la capital, es frecuentado por muchos expatriados, que en ese momento asistían a la retransmisión de un partido de fútbol.
Este lunes continuaban las operaciones «de rastreo y de verificación de casas adyacentes», precisó el ministro de Comunicación.
Los disparos terminaron a las 05H00 (locales y GMT), según un periodista de la AFP presente en las cercanías.
Por su parte, el presidente burkinés, Roch Marc Christian Kaboré, condenó este lunes este ataque. «Condeno con la mayor energía el abyecto atentado que cubrió de luto Uagadugú (…) la lucha contra el terrorismo es un combate muy largo», dijo. Prometió también una resistencia sin concesiones ante el terrorismo.
Su homólogo francés, Emmanuel Macron, también condenó este «ataque terrorista» y adelantó que se entrevistará «en la jornada» con Kaboré. Burkina Faso fue colonia francesa hasta 1960.
El ministro Dandjinou había mencionado víctimas «de diferentes nacionalidades» pero sin precisarlas. Posteriormente, se supo que entre los dieciocho muertos al menos uno era ciudadano francés y otro turco, constatándose también que uno de los heridos es de esta última nacionalidad.
El restaurante Istanbul está situado a unos 200 metros del café Cappucino, que en enero 2016 había sido blanco de un sangriento ataque yihadista, según un modo operativo similar, reivindicado por Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI). Aquel ataque dejó 30 muertos y 71 heridos, en su mayoría extranjeros.
– Asalto de fuerzas de seguridad –
Tras haber evacuado la zona, las fuerzas de seguridad -gendarmería, policía y ejército- lanzaron un asalto hacia las 22H15 contra los atacantes atrincherados en el edificio donde se encuentra el restaurante, según un oficial de gendarmería.
Los disparos, intensos al principio, se volvieron después esporádicos, informó un periodista de la AFP.
Un video publicado en Twitter muestra a la gente corriendo y gritando por las calles. En la secuencia siguiente se escuchan disparos.
El lunes por la mañana, el perímetro en torno al restaurante seguía cerrado. La policía científica se había desplegado en el lugar para tomar muestras para la investigación y la identificación de las víctimas.
Los heridos fueron trasladados al hospital Yalgado Ouedraogo.
«Estamos desbordados», reconoció durante la noche a la AFP un cirujano que habló bajo condición de anonimato. «Recibimos una decena de heridos, tres de los cuales murieron. La situación de otros heridos es muy crítica», agregó.
El alcalde de Uagadugú, Armand Béouindé, había informado que el ministro de Seguridad Simon Compaoré y el ministro de Energía Alpha Omar Dissa se encontraban estaban en el lugar.
Burkina Faso, país fronterizo con Malí y Níger, ha sido escenario de numerosos ataques yihadistas desde 2015.
El peor fue el ataque contra el hotel Splendid y el café Cappuccino, que dejó 30 muertos en enero de 2016, reivindicado por AQMI.
En diciembre de ese año una docena de soldados murieron en una operación contra un regimiento estacionado al norte del país. En octubre de 2016, un ataque precedente había dejado seis muertos: cuatro militares y dos civiles.
El país, ubicado en África Occidental, pobre y sin ningún acceso al mar, ha reiterado en varias ocasiones la necesidad de trabajar para «luchar contra el terrorismo» conjuntamente con la vecina Costa de Marfil, también golpeada por un atentado yihadista el 2016 que dejó 19 muertos.