La comisión de Debates del Congreso dio posesión hoy a la Junta Directiva para el periodo 2016-2017, luego de que el partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), el más numeroso, propuso para presidencia a su legislador Mario Taracena Díaz-Sol.
La Junta Directiva quedó aprobada por 119 votos a favor y 38 en contra en una votación en la que solo se presentó una sola planilla.
La planilla, integrada además de Taracena, incluye al primer vicepresidente Iván Oswaldo Arévalo, (bloque Reformador); segundo vicepresidente, Felipe Alejos (partido Todos); tercer vicepresidente, Rudy Castañeda (Unión del Cambio Nacional) y el cuarto secretario, Oscar Chinchilla (partido Creo).
Asimismo, como primer secretario quedó electo, Carlos Barrera, de la UNE; segundo secretario Luis Contreras (Reformador); tercer secretario, Roberto Klester (UNE); Oscar Chinchilla (CREO) cuarto secretario, y Aníbal Rojas, (VIVA), como quinto secretario.
La nueva conducción parlamentaria fue electa de intensas negociaciones de última hora que retrasaron toda la programación de las transmisión del mando. Fue hasta las 14:20 horas cuando los nuevos directivos fueron juramentados y tomaron posesión del cargo para el cual fueron electos.
En su discurso Mario Taracena se comprometió «a dedicar el esfuerzo y experiencia para que la calidad del trabajo y transparencia, sean el norte de mi proceder y estoy dispuesto a asumir la sanción del pueblo».
Puntualizó que el Organismo Legislativo debe responder a las demandas del pueblo que en los últimos meses ha reclamado, de una forma enfática, que las cosas cambien para propiciar un «verdadero Estado de Derecho y una verdadera democracia».
Taracena añadió que está claro que «el pueblo jamás va a tolerar que se utilice su representación para cometer actos de pillaje contra los recursos financieros nacionales, porque esa conducta es un crimen de lesa humanidad».
«Por aprovecharse de los recursos del Estado se dejan de atender las necesidades de la población vulnerable y el pueblo exige que sean manejados con transparencia», sentenció.
El político manifestó que «por cada quetzal mal utilizado o robado, muchos guatemaltecos están sufriendo hambre, de pobreza extrema, de salud desatendida y un futuro gris».
Anunció que trabajará para que el Congreso sea un referente para la confianza ciudadana y la lucha por la transparencia.
«Cada plaza pagada deberá tener un producto generado. Guatemala necesita de un trabajo dinámico para encontrar el verdadero proyecto de nación y se debe asumir el reto», concluyó el flamante presidente del Congreso unicameral.
Acto seguido, el mandatario saliente, Alejandro Maldonado, ofreció un informe de Gobierno, y momentos más tarde todo los asistentes al Congreso se trasladaron al Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, donde será juramentado el nuevo mandatario de Guatemala, Jimmy Morales y su vicepresidente Jafeth Cabrera.
En su informe al Congreso, Alejandro Maldonado, calificó de «graves» los problemas de pobreza y la violencia que sufre el país, y destacó la transparencia con la que condujo el Gobierno de transición que termina hoy con la investidura de Jimmy Morales.
Maldonado, quien llego a la Presidencia el 3 de septiembre pasado tras la renuncia de Otto Pérez Molina, en prisión acusado de corrupción, dijo que no se justifica que en esta época «aún persista con intensidad la pobreza y la violencia».