Como 47 millones de estadounidenses, Kate Rubins emitió su voto anticipado para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre. Pero la astronauta fue la única que usó una urna espacial, a poco más de 400 km sobre el planeta Tierra.
«Desde la Estación Espacial Internacional (ISS): voté hoy», escribió Rubins, en un pie de foto publicado el jueves en la cuenta de Twitter de la NASA.
En la fotografía, se observa a la astronauta con su cabello rubio flotando en el ambiente de gravedad cero, frente a un recinto blanco con un cartel de papel que decía «cabina de votación de la ISS».
Rubins -que comenzó un período de seis meses a bordo de la estación orbital la semana pasada- y la NASA describieron el proceso como una forma de votación en ausencia.
Una boleta electrónica segura, generada por la oficina del Condado de Harris, donde se encuentra el Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston, Texas (sur), fue enviada por correo electrónico a la ISS.
Rubins llenó la boleta en el correo electrónico y la envió de vuelta a la oficina del condado.
No es la primera vez que la astronauta realiza este proceso, pues ya votó en los comicios de 2016 desde la ISS. El Congreso aprobó una legislación en 1997 que hizo posible el voto desde el espacio.
«Consideramos un honor poder votar desde el espacio«, dijo en un vídeo antes de que ella y dos cosmonautas rusos despegaran desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajstán, el 14 de octubre.
«Si podemos hacerlo desde el espacio, creo que la gente también puede hacerlo desde la tierra«, comentó.
Se esperaba que otros tres astronautas estadounidenses también votaran desde el espacio, pero su viaje del 31 de octubre a la ISS se retrasó.