El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió este miércoles «respeto» para el expresidente de Bolivia, Evo Morales, a quien su país asila desde el martes, y defendió abiertamente su gestión al frente del gobierno boliviano.
«Respeto para Evo Morales, lo considero un buen gobernante, esa es mi opinión, aunque esto no es lo que nos llevó a tomar la decisión que tomamos; se le dio asilo porque estaba en peligro su vida», dijo López Obrador en su conferencia matutina.
El mandatario mexicano resaltó el origen de Morales al referirse a él como «el presidente indígena» que «dejó muy buenos resultados» en su país.
«Ojalá que se conozca cómo se comportó la economía y cómo sacó a Bolivia de ser un pueblo con mucha pobreza y marginación, cómo lo sacó adelante», enfatizó el dirigente izquierdista, conocido como AMLO por sus iniciales.
Morales, cuya residencia en México se mantendrá en secreto por su seguridad, «debe sentirse como en casa», dijo categórico López Obrador.
Desde el domingo una veintena de funcionarios y legisladores fueron acogidos en la embajada de México en La Paz, Bolivia, y en los días siguientes se fueron sumando «muchos más», según el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
«Nosotros tenemos ahora el compromiso de traer a México a quienes están en la embajada y a quienes nos están pidiendo asilo», dijo por último el presidente.
No especificó si enviará por los solicitantes un avión de la fuerza aérea mexicana, como lo hizo para ir por Morales a Chimore, Bolivia, que demoró más de ocho horas después de que varios países de la región se negaron a último momento a que se usaran sus pistas y espacio aéreo.