Pocos escándalos de corrupción han provocado tanta indignación como el engaño que se fraguó en el despacho de Roxana Baldetti para contratar una fórmula mágica que sanearía el lago de Amatitlán. Ahora, la estructura que se creó para ese negocio ha caído por investigaciones de la CICIG y el MP. El fantasma de una pena más larga ronda a la exvicepresidenta.
Redacción de Crónica
El lago de Amatitlán es uno de los más contaminados del país. Hace un año, exactamente, en la Vicepresidencia de la República se ideó un plan para rescatarlo, supuestamente con la aplicación de una fórmula milagrosa que costaría Q137.8 millones, la cual resultó ser un fraude.
Ahora, la estructura que efectuó la engañosa operación ha caído y la exvicepresidenta Roxana Baldetti –su principal defensora y en prisión preventiva acusada de ser la cabecilla de una estructura delictiva dedicada a la defraudación aduanera– resultó ser también jefa de otra mafia, por lo que deberá enfrentar un nuevo proceso judicial.
Fiel a la forma de crear estructura delictivas, Baldetti aparece ligada esta vez con su hermano como operador, además de varios funcionarios de su despacho, en especial otro de sus secretarios.
La captura de 14 implicados en el opaco negocio, que incluso fue avalado en su momento por la Embajada de Israel, revivió el escándalo que vanamente intentó defender Baldetti, quien aseguró en aquel entonces que la aplicación del producto –que resultó ser entre un 97 y 98 por ciento agua con sal– sanearía el manto acuífero. El caso había sido destapado por elPeriódico.
Desde un inicio, el proyecto evidenció ser un caso más de corrupción liderado por Baldetti, pues el contrato se adjudicó en modalidad de excepción –sin que existiera licitación pública– al único oferente: la empresa israelí M. Tarcic Engineering Ltd., que tenía apenas nueve meses de haber sido inscrita en la Superintendencia de Administración Tributaria.
Además, no se hizo un estudio ambiental para conocer el impacto que el proyecto tendría en el lago, y, por si fuera poco, científicos y expertos ambientalistas afirmaron en su momento que el proyecto no solucionaba los problemas de fondo que contaminan el cuerpo de agua.
Cabecillas de la estructura
La estructura montada para estafar al Estado –y que operó tanto interna como externamente en la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca del Lago de Amatitlán (AMSA) para lograr de manera ilícita la adjudicación del contrato– era coordinada por la exvicegobernante y operada por su hermano Mario Alejandro Baldetti Elías, quien es sindicado de asociación ilícita, fraude y tráfico de influencias. Fue él quien negoció los dos contratos por Q137.8 millones adjudicados a la empresa israelí y el operador particular entre el Estado y la compañía, con la aprobación de la exvicemandataria.
Ambos hermanos, según las investigaciones, cooptaron los puestos más importantes de AMSA para asegurarse que se concretara la adjudicación del negocio anómalo. El círculo se cerró con el nombramiento de Pablo González como secretario del Agua, lo que le otorga a la red el poder para viabilizar los procedimientos administrativos con el fin de que el contrato sea otorgado a la empresa Tarcic, se afirmó durante una conferencia de prensa en la sede del MP por la fiscal general, Thelma Aldana, y el jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, Iván Velásquez.
El poder detrás del trono
Las pesquisas dan cuenta de que el hermano de la exvicemandataria era el que ejercía el poder en AMSA y quien coordinaba todas las acciones de las subestructuras, las cuales se conjugaron para realizar esta operación fraudulenta al Estado.
Velásquez señaló que el fallido proyecto de salvar el lago era una estafa al Estado porque no se aseguró la idoneidad del producto, no se realizó una investigación científica que lo respaldara y no se solicitaron registros sanitarios ni estudio de impacto ambiental.
Aldana subrayó que la empresa israelí M. Tarcic Engineering Ltd. fue constituida con el único fin de obtener el contrato de Q137.8 millones. Operaron a nivel político y técnico para que se adjudicara, enfatizó la jefa del MP.
Todo estaba bien planificado para que el negocio se diera como ellos querían, es por ello que el anuncio para ofertar al portal del Sistema de Adquisiciones y Compras del Estado se subió solo por un día. Era imposible que juntaran todos los documentos, sin embargo, la empresa israelí ya los tenía, dijo Aldana.
Testaferros para desviar fondos
La investigación da cuenta de que se utilizaron empresas y personas para desviar los fondos a terceras personas –tanto funcionarios como personas privadas–. El dinero fue a parar a los bolsillos de cinco personas, todas ellas capturadas y puestas a disposición de los tribunales de justicia.
De esa manera, las empresas Industrias Complutenses S. A., Prima Qualitá S. A., Corporación SDG S. A. e Inverlink S. A., relacionadas con el secretario del Agua, recibieron en enero de 2015 dinero de la cuenta de la empresa Tarcic.
El monto retirado y entregado a González fue de Q3.1 millones, los cuales, según las pesquisas, fueron parte del pago del Estado por el fallido contrato. Asimismo, Marylin Sosa Azurdia, quien laboraba en el Ministerio de Ambiente y era la asistente técnica de González, recibió de Tarcic Q60 mil.
Se suma a ellos Rubén Estuardo Torres Anleu, técnico del Ministerio de Ambiente, quien obtuvo Q300 mil; además, conocía el proyecto de limpieza del lago y era supervisado por González.
También se encuentran implicados Allan Franco de León, quien trabajó en el Ministerio de Ambiente, era parte de la empresa Tarcic y recibió Q80 mil, y Manuel Francisco Sosa Batres, quien obtuvo Q118 mil.
Palabras al viento
Frases dichas por Roxana Baldetti cuando visitó el 23 de marzo del 2015 el lago de Amatitlán para defender la
adjudicación hecha a una empresa israelí:
¿Cuántas mojarras llevo para poder invitarlos a todos? En octubre calculo que los voy a invitar a comer mojarra.
La ladrona sí viene… Solo el dron nos faltó.
Hugo Roitman, representante legal de la empresa israelí, y Mario Baldetti, hermano de la exvicemandataria, son dos de los 14 capturados.
El ministro de Gobernación, Manuel Rivas; la fiscal general, Thelma Aldana, y el jefe de la CICIG, Iván Velásquez, dan a conocer cómo se fraguó la estafa al Estado.
Asì se operó el negocio turbio por el Proyecto de «saneamiento» del lago de Amatitlán