La audiencia de primera declaración por el caso Cooptación del Estado continuó este miércoles con la declaración de los principales sindicados. Todos ellos tienen en común haber sido cercanos a Roxana Baldetti mientras fungió como vicepresidenta entre 2012 a 2015.
La jornada fue agitada porque de los cercanos a Baldetti declararon: su exasistente Judith Ruiz; su antigua mano derecha Daniela Beltranena; su presunto lavador Jhonatan Chévez; y su exabogado Mario Cano.
El primero en hablar fue Judith Ruiz, quien durante varios años fungió como algo más que una asistente. Según su declaración ante el juez se puede comprobar que tuvo una relación cercana con los hijos y el esposo de la que era vicepresidenta. Sus hijos me veían como a una mamá, confesó la sindicada, quien admitió haber conocido a Salvador Estuardo González, alias Eco y Victor Hugo Hernández, ambos colaboradores eficaces del MP.
Luego se sentó en el banquillo de los acusados la exdiputada y también antigua asistente vicepresidencial, Daniela Beltranena. Su versión de los hechos no fue tan extensa, pero fue clara en rechazar todos los señalamientos en su contra. Dijo al Juez que no manejó dinero, que tampoco conocía de las empresas de cartón y que tampoco compró vehículos con dinero ilícito. A la exfuncionaria de 27 años se le quebró la voz, pero inmediatamente criticó las publicaciones de prensa donde se le señalaban como presunta lavadora de dinero.
Por su parte, Jonathan Chévez, supuesto lavador de dinero de la exvicepresidenta, dijo ante el Juzgado B de Mayor Riesgo que conoció a Juan Carlos Monzón y que a través de sus empresas le otorgó préstamos. También admitió haber gestionado la compra de un helicóptero para Otto Pérez Molina, sin embargo, aseguró desconocer si la fuente del financiamiento era ilícita. Según Chévez ha colaborado desde hace un año con las investigaciones por lo que se considera a sí mismo como un prisionero de guerra.
Por último llegó el turno de Mario Cano, quien defendió a Baldetti en diversos casos, habló por casi dos horas y media ante el juez. Primero se disculpó por no contar con defensa y aseguró que se defendería técnicamente por ser abogado. El sindicado aseguró que cobró $1 millón por defender a Baldetti, más una propiedad y Q500 mil en efectivo. Según Cano desde agosto de 2015 sabía que estaba siendo investigado por la CICIG y el Ministerio Público.
La audiencia se retomará este jueves con la declaración de más imputados. Se prevé que el expresidente Otto Pérez Molina y la exvicepresidenta Roxana Baldetti declararán por los diversos delitos que los fiscales les han imputado.