Álex de la Iglesia transforma Pedraza, un pequeño pueblo de Segovia, en el epicentro de la lucha entre el bien y el mal en ‘30 monedas‘, la nueva serie española de HBO cuyo primer capítulo llega el próximo domingo 28 de noviembre.
Monstruos, posesiones, exorcismos, reliquias e incluso el mismísimo diablo se dan cita en esta ficción en la que el director de ‘El Día de la Bestia’ o ‘Las brujas de Zugarramurdi‘ vuelve a combinar la iconografía religiosa con oscuros elementos sobrenaturales para destapar una demoníaca y global conspiración que busca hacerse con las 30 monedas por las que Judas traicionó a Jesús.
Compuesta por ocho episodios que se estrenaran semanalmente en HBO, ‘30 monedas‘ -que celebró su puesta de largo mundial como Proyección Especial Fuera de Competición en el 77º Festival Internacional de Cine de Venecia en septiembre y también pasó por Sitges el pasado mes de octubre- supone la segunda incursión de Álex de la Iglesia en el mundo de las series tras ‘Plutón BRB Nero‘, una comedia futurista.
Desde entonces, la irrupción de las plataformas ha modificado sustancialmente el mercado audiovisual que vive, según el realizador bilbaíno, una «edad de oro» al que se ha llegado gracias al empuje de los servicios de streaming.
Y, fiel a la postura de «compatibilizar ventanas» que viene defendiendo desde hace años, De la Iglesia señala en una entrevista concedida a Europa Press que esto tampoco supone abandonar a su suerte a las salas de cine, que atraviesan una situación crítica lastradas por la pandemia de coronavirus.
Nuevas ventanas
«Por supuesto que quiero que los cines sobrevivan y estoy absolutamente de acuerdo con todos los que quieren mantener las salas. Pero eso no significa que no piense que en este momento existen otras ventanas y que crea que las plataformas han ayudado a que el audiovisual esté viviendo una auténtica edad de oro«, argumenta al ser preguntado por la carta firmada por numerosos representantes del cine español como Almodóvar, Trueba, Coixet o Bayona en la que reclaman al Gobierno un «plan de supervivencia» para las salas cinematográficas.
El cineasta, que no se encuentra entre los firmantes de la misiva hecha pública el pasado viernes, insiste en que su amor por el cine, por la salas y por la experiencia cinematográfica no es incompatible con reconocer que «las cosas han cambiado gracias a las plataformas» y que lo han hecho «de forma increíblemente positiva».
«Los formatos son absolutamente compatibles y negarse a la compatibilidad es negar el avance. Esto podría haber ocurrido hace 10 o 15 años, y no se hizo porque la industria no lo entendía, ahora lo tiene delante y es lamentable que algunos sigan sin verlo«, proclama De la Iglesia que ya defendió esta «compatibilidad» de ventanas durante su etapa como presidente de la Academia de Cine, cargo que ocupó de junio de 2009 a abril de 2011.
De Segovia al Vaticano
«Hay que salvar las salas, sin duda alguna, pero lo que hay que salvar fundamentalmente es la producción cinematográfica y ahora las salas no son la única ventana«, sentencia el director que en ‘30 monedas‘ viaja desde Segovia hasta el corazón del Vaticano de la mano de tres improbables héroes:
- un cura exconvicto y boxeador (Eduard Fernández)
- una veterinaria (Megan Montaner)
- y un alcalde algo atolondrado (Miguel Ángel Silvestre).
- Tres singulares personajes que se enfrentan a demoníacas y poderosas fuerzas que buscan reunir la reliquia más codiciada, las 30 monedas de Judas. Y una de ellas ha acabado en Pedraza.