Ponen en riesgo uno de los valores del equipo blanco de cara al partido del próximo día 28 de mayo en San Siro.
Además del propio Atlético de Madrid, hay un aspecto que empieza a preocupar bastante en el Real Madrid de cara a la final de la Champions League del próximo 28 de mayo en Milán:el estado del césped del estadio de San Siro. Los distintos medios han puesto énfasis en el mal aspecto del verde de cara al encuentro, y auque se está trabajando para ponerlo a punto hay ciertas dudas con respecto a los plazos y el estado del pasto para el día del choque.
Según podemos leer en varios medios, entre ellos el diario MARCA, Paul Burgess, el jefe de los servicios del Real Madrid encargados de mantener el césped de las instalaciones merengues, ha estado en Milán para comprobar cómo está el césped a nueve días de la final. Y por supuesto también los responsables de la UEFA a estos efectos. Keith Dalton, miembro de la parcela del máximo organismo del fútbol europeo encargada de estos menesteres, fue pacificador: «Nos enfrentamos a un gran desafío con el césped para tenerlo al nivel de una final de la Champions. El césped estará listo, pueden estar tranquilos. Lo que ocurre es que estamos apuntando muy alto, queremos la perfección porque se trata de una final de la Champions League«.
No obstante, este tema mosquea en el seno del Madrid. Saben que todo lo que suponga un estado algo irregular del pasto beneficia los intereses del Atlético, cuyo juego pasa por destruir el del rival, no dejarle jugar y meter balones largos al contragolpe. Es más o menos lo mismo que intentaba hacer Mourinho siendo entrenador blanco contra el Barça, con la particularidad de que esto es una final que se juega en un campo neutral.
Aunque Zidane está poniéndo énfasis en el aspecto de la intensidad, se prevé un choque en el que los blancos lleven la iniciativa a través de una posesión larga y pausada. Por ello, que el césped no esté en perfectas condiciones es, en todo caso, una ventaja inicial para los colchoneros.