Airbus contempla nuevas reducciones en su ritmo de producción y podría tomar decisiones «amargas» y «difíciles» para el empleo «antes de finales de julio», advirtió el presidente ejecutivo del fabricante aeronáutico europeo.
En una carta dirigida a cerca de 140.000 empleados del grupo y publicada el sábado por el diario francés económico La Tribune, Guillaume Faury, indica que volverá «antes de finales de julio con más detalles» sobre «el plan de adaptación» del grupo, que ya redujo un 40% su producción para 2020 y 2021 en comparación a las previsiones precedentes para estos dos años, para hacer frente a la crisis de covid-19.
Según Faury, el nivel de tráfico aéreo de 2019 a nivel mundial no volverá antes de 2023 «en el mejor de los casos».
«El alcance de la crisis de covid-19 para nuestro sector obliga a Airbus a adaptarse. Esta adaptación significa una reducción significativa del formato de nuestra empresa […]. Nos obliga a tomar decisiones amargas», dice Faury en su carta en la que habla igualmente de la necesidad de «valor» frente a «decisiones difíciles».
El responsable ya había indicado delante de directivos del grupo que sería necesario un plan de reestructuración con supresiones de empleos.