- El gobierno de Marruecos dijo que equipos de búsqueda de Gran Bretaña, España, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos se estaban uniendo a los esfuerzos para excavar entre los escombros en las aldeas de las montañas del Atlas.
Voz de América
Los equipos de rescate en Marruecos proseguían este lunes la tarea de encontrar sobrevivientes entre los escombros que dejó un potente terremoto el viernes que mató a más de 2.100 personas.
El gobierno dijo que equipos de búsqueda de Gran Bretaña, España, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos se estaban uniendo a los esfuerzos para excavar entre los escombros en las aldeas de las montañas del Atlas.
El terremoto de magnitud 6,8 sacudió el área el viernes por la noche y dejó más de 2.400 heridos, además de los muertos. El Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que el epicentro del sismo estuvo a 72 kilómetros al suroeste de Marrakech.
Naciones Unidas estimó que 300.000 personas se vieron afectadas por el terremoto, que fue el más potente que ha azotado Marruecos en un siglo. Los esfuerzos de rescate fueron lentos y algunos marroquíes se quejaron en las redes sociales de que el gobierno no permitía la entrada de más rescatistas al país para ayudar.
El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo a los periodistas el domingo que su administración estaba dispuesta a brindar cualquier asistencia necesaria a Marruecos.
Los que quedaron sin hogar por la destrucción del terremoto durmieron a la intemperie por tercera noche consecutiva el domingo.
El rey Mohammed VI ordenó tres días de luto nacional a partir del domingo mientras se arriaban las banderas en todo el país. El ejército movilizó equipos especializados de búsqueda y rescate, y el rey ordenó que se suministraran agua, raciones de alimentos y refugio a quienes perdieron sus hogares.
El rey llamó a las mezquitas de todo el reino a realizar oraciones el domingo por las víctimas, muchas de las cuales fueron sepultadas el sábado en medio del frenético trabajo de rescate en las cercanías.
Aunque algunos equipos internacionales de búsqueda y rescate llegaron el domingo, cuando una réplica sacudió a los dolidos y conmocionados marroquíes, otras cuadrillas listas para ayudar expresaron su frustración mientras esperaban a que el gobierno solicitara asistencia de forma oficial.
La réplica tuvo una magnitud de 3,9, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. Por el momento no estaba claro si había causado más daños o víctimas, aunque probablemente fue lo suficientemente fuerte para tensar los nervios en zonas donde el terremoto dejó edificios inestables y la gente hablaba de su temor a las réplicas.
La mayoría de las muertes (1.351) ocurrieron en el distrito de Al Haouz, en la cordillera del Alto Atlas.
[Con información de AP, AFP y Reuters]