- El Periodista recibió medida sustitutiva en el segundo de los casos en su contra montados por el Ministerio Público (MP), que insistió en que la audiencia fuera suspendida
El periodista José Rubén Zamora se despertó este sábado en su pequeña y fría bartolina de Mariscal Zavala con la sensación de libertad por primera vez en más de 800 días de encarcelamiento, luego de que el juez Segundo Penal Erick García, le concediera medidas sustitutivas y pueda abandonar el presidio al concluir los trámites de liberación. Su liberación podría producirse en las próximas horas.
El propio fiscal Rafael Curruchiche acudió a la audiencia e intentó dirigir a su equipo de fiscales, quienes fracasaron una y otra vez en sus intentos por impedir que la audiencia pudiera concluir, llegando a recusar al juez García verbalmente durante la audiencia, sin argumentos para hacerlo.
El juzgador recurrió a la legislación vigente en el país y los tratados internacionales, especialmente de derechos humanos, que consideran que la prisión preventiva debe ser la excepción y no la norma en los casos judiciales. Aunuqe le restringió a arresto domiciliar en el departamento de Guatemala y le proibió salir específicamente del país, no le impuso ninguna fianza, considerando que durante el tiempo que ha estado en la cárcel Zamora Marroquín no ha podido generar ingresos, ya que perdió du diario «elPeriódico».
Zamora fue beneficiado con medidas sustitutivas en un primer caso por el que fue acusado de lavado de dinero, por lo que aún guardaba prisión por un segundo caso, en el que el MP le acusa de obstrucción de la justicia. Se sabe que la FECI intenta aún montar un tercer y cuarto casos en contra del periodista.
La fundación Contra el Terrorismo, el principal aliado en estos casos del MP, ha iniciado una campaña en redes sociales en contra del periodista, el juez García y su resolución.
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En cambio la noticia ha sido bien recibida en diversos sectores de la sociedad civil, que clamaban por #ZamoraLibre, así como organismos internacionales que se dedican a defender la independencia judicial y las organizaciones de prensa. El día jueves varaias de ellas se pronunciaron a favor de que se cumpliera con el debido proceso y que no se aceptaran más las medidas solicitadas por el MP y la Fundación Contra el Terrorismo, que lograron previamente cinco suspensiones de esta audiencia.
Al término de la audiencia, Zamora se mostró satisfecho y dijo que se someterá a un chequeo médico, ya que durante los 800 días de presión sufrió lo que podría calificarse como tortura, aunque sus condiciones en la cárcel mejoraron con el cambio de Gobierno, ya que la administración Giammattei le sometió a condiciones que la ONU y otros organismos calificaron de «inhumanas».
Larga jornada en el tribunal
Como estaba previsto, la audiencia para conocer la petición humanitaria y legal de Zamora se inició a las 11:30 AM, pero antes de la misma se conoció la recusación que presentó horas antes el abogado de la Fundación Contra el Terrorismo (FCT), Raúl Falla, quien sin embargo incurrió en errores en el escrito, además de no presentar ninguna prueba contra el juez en sus justificaciones para solicitar que se apartara del caso.
En cambio, en poco tiempo montaron un caso por supuesto lavado de dinero por Q300 mil quetzales, para poder encarcelar al periodista, que luego perdió su diario por un cerco comercial y presiones del Gobierno anterior.
En todo caso, el juez García concedió tres horas a Falla y al MP para que se presentaran a la audiencia y cumplieran con su papel correctamente. Falla, quiene estaba en el edificio de tribunales, pues fue visto en el único ascensor que funciona, prefirió no acudir a la audiencia y defender su recusación, pero el MP lo hizo por él, aunque sin lograr el efecto de la suspensión, que la fiscal auxiliar solicitó en al menos tres ocasiones.
Esta misma mecánica fue utilizada por la FCT y el MP para suspender en cinco ocasiones audiencias similares durante los últimos seis meses. Zamorra Marroquín se considera perseguido político por parte de la fiscal general Consuelo Porras y el expresidente Alejandro Giammattei. elPeriódico» publicó más de 140 casos de corrupción durante el gobierno de Giammattei, pero ninguna de ellas mereció atención del MP para ser investigadas.
En el recinto judicial, una sala de audiencias amplia, se encontraban varios observadores internacionales, quienes permanecieron durante la larga jornada de argumentos y contrargumentos jurídicos sobre la prisión provisional. Entre las personalidades destacaba una misión de la ONU (derechos humanos), así como el embajador de Alemania, Hardy Boeckle, el ministro consejero de la embajada de España, Juan Antonio Frutos, y la primera secretaria de la embajada de Suecia, Verónica Melander.