Inditex, propietario de Zara, aumentó sus beneficios en un 9.9% en el primer semestre fiscal, hasta 1,540 millones de euros, indicó este martes el grupo textil español.
La facturación superó los 12,800 millones en el primer semestre fiscal –entre el 1 de febrero y el 31 de julio–, un aumento del 7% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, sin la adopción de una nueva norma contable, el beneficio neto solo habría aumentado un 7%.
Aunque Inditex no dio detalles sobre su beneficio neto del segundo trimestre (entre el 1 de mayo y el 31 de julio), una comparación con el resultado publicado en el primer trimestre permite evaluarlo en 815 millones.
Estas cifras son ligeramente inferiores a las previsiones de los analistas consultados por el proveedor de información financiera FactSet, que auguraban 832 millones.
Su principal competidor, la compañía sueca H&M, publicó en junio un beneficio neto de 427 millones de euros entre mazo y mayo, estable en relación al año anterior, con una facturación al alza del 11%.
El grupo dirigido por Pablo Isla mantiene su objetivo de crecimiento de ventas con una tasa constante de entre 4% y 6% en 2019, según un comunicado.
El grupo, propietario de marcas como Bershka, Pull&Bear, Massimo Dutti, Stradivarius, Oysho, Zara Home y Uterqüe, tiene 7.420 puntos de venta de 96 mercados.
Inditex tiene el objetivo de estar presente en todo el mundo en 2020.
«El lanzamiento de la venta online global esta en linea con lo previsto» indicó la dirección de Inditex, y anunció que en septiembre-octubre «Zara lanzará la venta online en Sudáfrica, Colombia, Filipinas y Ucrania».
El grupo, fundado en Galicia, en el noroeste de España, por Amancio Ortega, trabaja con más de 1,800 proveedores y 7,200 fábricas en el mundo, según su web.