La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, denunció este lunes más casos de «posibles ejecuciones extrajudiciales», así como de «torturas y malos tratos» de detenidos en Venezuela.
En un discurso en la 42ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas en Ginebra, Bachelet presentó un duro nuevo informe sobre la situación en Venezuela bajo el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
«Mi Oficina ha seguido documentando casos de posibles ejecuciones extrajudiciales cometidas por miembros de las Fuerzas de Acción Especiales de la Policía Nacional -conocidas como FAES- en algunos barrios del país», señaló.
«Tan sólo en el pasado mes de julio la organización no-gubernamental ‘Monitor de Víctimas’ identificó 57 nuevos casos de presuntas ejecuciones cometidas por miembros del FAES en Caracas», precisó la exmandataria chilena.
Bachelet indicó además que su oficina documentó «casos de tortura y malos tratos, tanto físicos como psicológicos, de personas arbitrariamente privadas de su libertad, en particular de militares».
En contraposición a estas denuncias, dijo que el gobierno de Maduro cumplió con «la excarcelación» de «83 personas», entre ellas «aquellas cuya detención había sido considerada como arbitraria por el Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria».
En un primer informe, presentado el pasado 5 de julio, Bachelet había denunciado la «erosión del Estado de derecho» en Venezuela, advirtiendo también que las sanciones internacionales agravaban la crisis en el país.
«La situación de derechos humanos sigue afectando a millones de personas en Venezuela y con claros impactos desestabilizadores en la región», reiteró este lunes.
Sanciones para las oenegés
Bachelet deploró, por otra parte, «las recientes acciones» con vistas a aprobar una ley que «tipifica como delito las actividades de las organizaciones de derechos humanos nacionales que reciben fondos del extranjero».
«Esa ley, si se aprueba y aplica, reducirá aún más el espacio democrático», advirtió la representante de la ONU.
Hace unas semanas, el número dos del gobierno, Diosdado Cabello, advirtió que la oficialista Asamblea Constituyente -que preside- aprobaría una legislación para sancionar el financiamiento externo de las oenegés.
«Vamos a (…) aprobar una ley para sancionar severamente a esas oenegés y personas que están recibiendo plata del imperialismo para conspirar contra nuestro país. Eso no lo permiten en Estados Unidos», dijo Cabello el pasado 14 de agosto, en su programa semanal en la televisión estatal VTV.
Grave situación humanitaria
En su nuevo informe, Bachelet insistió además en que las sanciones del gobierno del presidente estadounidense Donald Trump contra el gobierno de Maduro contribuyen a «agravar la situación humanitaria» del país y el «éxodo» de venezolanos.
La representante de la ONU alertó que la situación económica y social del país se «sigue deteriorándose rápidamente».
La economía «atraviesa lo que podría ser el episodio hiperinflacionario más agudo que haya experimentado» América Latina, subrayó.
Actualmente, el salario mínimo equivale a 2 dólares mensuales, en comparación con los 7 dólares en junio, precisó Bachelet. «Una familia necesita percibir el equivalente a 41 salarios mínimos mensuales para poder cubrir la canasta básica alimentaria».
Venezuela vive la peor crisis en su historia reciente, reflejada en hiperinflación, el desplome de su vital producción de crudo y el éxodo de 3,6 millones de personas desde principios de 2016.