El excongresista Joe Walsh anunció este domingo su candidatura a las primarias republicanas contra el mandatario Donald Trump de cara a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020.
Walsh, de 57 años, es el segundo contrincante republicano declarado de Trump, después de que el exgobernador de Massachusetts, William Weld, un moderado, anunciara su candidatura en abril.
«Me estoy lanzando porque él es un incapaz. Alguien tiene que dar un paso al frente y hace falta una alternativa», dijo Walsh en un programa de ABC y quien actualmente es un comentarista de radio conservador.
«El país está harto de las rabietas de este tipo. Es un niño».
Después de desafiar a los republicanos tradicionales en 2016 al hacerse con la nominación del partido, Trump cuenta ahora con una base sólida de apoyo que parece casi impermeable a las controversias que genera constantemente.
Pocos republicanos se han mostrado dispuestos a desafiar públicamente al presidente.
Walsh, quien fue uno de los favoritos del movimiento derechista Tea Party, aseguró que era porque «tienen miedo. Porque están asustados a muerte».
Él desafió a Trump en los ámbitos de su carácter, competencia y conservadurismo.
«Es errático. Es cruel. Alimenta la intolerancia. Es incompetente … Es un narcisista», dijo Walsh.
«Ha aumentado el déficit más rápido que el presidente Obama».
Si bien ni él ni Weld tienen muchas posibilidades de arrebatarle la nominación al presidente, la aparición de sus voces disidentes podría arrojar luz sobre las divisiones dentro del partido.
Trump no es el primer presidente en funciones que enfrenta unas primarias.
En 1980, Jimmy Carter tuvo que luchar hasta el final de las internas antes de prevalecer contra el senador Ted Kennedy. Carter ganó la nominación del partido, pero perdió las elecciones generales ante Ronald Reagan.