El canciller hondureño, Lisandro Rosales, defendió este sábado ante la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, de visita en Tegucigalpa, los éxitos que a su juicio ha tenido el gobierno de Juan Orlando Hernández en el combate del narcotráfico.
A partir del 2014, cuando Hernández tomó posesión, «23 cabecillas de los carteles del narcotráfico fueron entregados en extradición» a cortes de Estados Unidos, afirmó el canciller tras reunirse con Pelosi, quien encabeza una delegación de 14 congresistas estadounidenses, demócratas y republicanos.
La delegación inició su visita a Centroamérica en Guatemala, siguió a El Salvador y concluirá este sábado en Honduras, para verificar las causas del aumento de las corrientes migratorias de los tres países hacia Estados Unidos.
En Honduras, la delegación no se reunió con el presidente Hernández. Rosales argumentó que el gobernante tenía compromisos previos con caficultores.
Al resaltar los logros del gobierno ante los traficantes de drogas, Rosales añadió que también expuso a Pelosi que 18.733 kilos de cocaína fueron decomisados, así como destruidos 18 narcolaboratorios y 259 narcopistas clandestinas, desde 2014.
«El gobierno de Honduras agradece el apoyo del gobierno y del Congreso de Estados Unidos en su compromiso de enfrentar y combatir los flagelos que amenazan la seguridad regional y hemisférica», resaltó.
Sin embargo, el pasado viernes el presidente Donald Trump incluyó a Honduras en una lista de 22 países identificados por servir de tránsito a los narcotraficantes.
También el presidente hondureño fue mencionado en un testimonio de un capo de la droga presentado por la fiscalía federal ante una corte de Nueva York por presuntos vínculos con su hermano, Antonio ‘Tony’ Hernández, considerado en el tribunal un «narcotraficante a gran escala».
El hermano del mandatario fue capturado en noviembre en Miami y es procesado en Estados Unidos.