Los Angeles, Estados Unidos | AFP |
Miles de simpatizantes del presidente estadounidense, Donald Trump, y manifestantes en contra se enfrentaron el domingo en California (oeste), en una protesta que terminó con 14 detenidos, según la policía.
Una manifestación pacífica organizada en Berkeley, una ciudad universitaria a las afueras de San Francisco, se volvió violenta cuando comenzaron los enfrentamientos entre los dos grupos en el parque Martin Luther King Jr, que estaba cerrado al público.
Cientos de militantes antirracistas, vestidos de negro, saltaron las barricadas policiales para encararse al pequeño grupo de simpatizantes de Trump que se habían presentado pese a que la manifestación «No al marxismo en Estados Unidos» fue cancelada por miedo a disturbios.
Los contra-manifestantes rodearon a quienes apoyaban a Trump y comenzaron a cantar «No a Trump, no al KKK (Ku Klux Klan), no a Estados Unidos fascista» y «Nazi, vuelve a casa».
Varios de estos contra-manifestantes, que llevaban la cara cubierta, fueron sacados del lugar por la policía. Catorce personas fueron detenidas, la mayoría por no cumplir la prohibición de utilizar máscaras, garrotes y otros objetos que pudieran ser utilizados como armas.
Un policía disparó una bala de goma a un manifestante que intentó cruzar una barricada policial, de acuerdo a Los Angeles Times.
Joey Gibson, líder del grupo derechista Patriot Prayer, fue rociado con gas pimienta por parte de contra-manifestantes, relató un fotógrafo de la AFP.
Varios videos que circulan en las redes sociales muestran como manifestantes de extrema derecha atacan físicamente a simpatizantes de Trump y periodistas.
Los funcionarios del gobierno municipal habían negado al menos tres permisos de ambos grupos para protestar en ese parque.
Amber Cummings, una seguidora de Trump, había organizado la manifestación «No al marxismo en Estados Unidos», pero luego pidió a los potenciales asistentes que no se presentasen por temor a la violencia.
La policía dijo que las 4.000 personas concentradas se dispersaron a primera hora de la tarde.
Estos incidentes siguen a los de Charlottesville (Virginia, este) de hace unas semanas, en los que una mujer murió cuando un supremacista blanco embistió a un grupo de manifestantes contra el racismo.