El Real Madrid se enfrenta el miércoles en Vigo al Celta en la primera de las dos ‘finales’ que le quedan al equipo blanco para lograr alzar su primera Liga desde 2012, para lo que necesita cuatro puntos en sus dos últimos partidos.
Los blancos, segundos en la clasificación liguera empatados a 87 puntos con el líder, el Barcelona, pueden ponerse por delante en la tabla si puntúan ante el Celta, en este partido atrasado de la 21ª jornada del campeonato español.
El encuentro tendría que haberse jugado en febrero pasado, pero el temporal que azotó Galicia obligó a posponerlo y la buena marcha del Real Madrid en la Liga de Campeones, donde ha llegado a la final, y del Celta en la Europa League, en la que fue semifinalista, no dejó más opción que jugarlo esta semana.
El partido se ha convertido así en decisivo para la resolución de la Liga, que finaliza el próximo fin de semana, ya que de ganar en Balaídos, a los blancos les bastaría un empate el domingo en el campo del Málaga para alzarse con el título.
– «Ganar la Liga no es fácil» –
En cambio, una derrota en Vigo o en Málaga, o dos empates, impulsaría las opciones del Barcelona, sabiendo, además, que en caso de empate final a puntos, los azulgrana serían los ganadores por su mejor diferencia de goles en los duelos particulares (1-1, 3-2).
«Sabemos que ganar la Liga no es nada fácil. Cada día nos acercamos, seguimos sumando, nos faltan dos partidos y vamos a intentar seguir en esta línea», dijo el domingo el técnico blanco, Zinedine Zidane, tras el partido contra el Sevilla.
Los merengues llegan a este encuentro en una forma inmejorable y la moral por las nubes tras clasificarse para su segunda final consecutiva de Liga de Campeones la pasada semana, a lo que se añade que llevan 62 partidos marcando al menos un gol, con lo que superaron el récord que tenía el Bayern de Múnich en los grandes campeonatos, con 61 encuentros entre 2012 y 2014.
El técnico Zinedine Zidane podrá contar con todas sus estrellas, excepto el lesionado Gareth Bale, a las que volvió a dar descanso contra el Sevilla.
«Hemos tenido ocho o nueve meses de competición en los que hemos hecho el trabajo y ahora falta acabarlo, pero rematar es la parte más difícil, así que vamos a seguir concentrados», advirtió, no obstante, Zidane, consciente de la dificultad de Celta y Málaga.
Los gallegos, que su primera preocupación el miércoles, llegan tras recibir el duro mazazo de su eliminación en semifinales de la Europa League por el Mánchester United, competición que se habían puesto como prioridad.
– «Puede perder cualquiera» –
A ello se une que los hombres de Eduardo Berizzo, con la permanencia ya asegurada y la vista puesta en Europa, han perdido sus últimos cinco partidos en el campeonato liguero.
Pero el Celta ya eliminó al Real Madrid en cuartos de la Copa del Rey (2-1, 2-2) y también pudo ganarle al Barcelona en octubre en Liga (4-3).
«Y si nosotros hemos perdido puede perder cualquiera. Además quiero recordar que nosotros en Vigo hemos perdido en varias ocasiones», decía el domingo el entrenador barcelonista, Luis Enrique Martínez.
Los ‘celtiñas’ ya no se juegan nada, pero podrían buscar dar una alegría a su afición ante uno de los grandes de la Liga, antes de despedir la temporada el domingo en su campo ante la Real Sociedad.
Para ello, volverán a contar con su delantero más en forma, Iago Aspas, que con sus 18 goles es el máximo artillero nacional y el cuarto mejor goleador del campeonato por detrás de Messi (35), Luis Suárez (27) y Cristiano Ronaldo (22).