PROVOCATIO: La importancia de las percepciones


Lo más relevante de este cuadro es que solo un evaluado tiene un escaso saldo positivo, indicador resultante después de restar lo favorable y lo desfavorable. Lo anterior, evidencia el grado de precariedad en la oferta. Por cierto, como dato curioso, de ganar este personaje, sería la primera vez en la historia que el hijo de un expresidente, le entrega la banda presidencial a otro hijo de expresidente. Repito, no se trata de tener preferencias o de impulsar a alguien en particular, sino basarse en la data disponible. 


José Alfredo Calderón E. (Historiador y analista político)

Recientemente, circuló un sondeo de opinión realizado por CID-Gallup, en el cual se mide la percepción ciudadana sobre ciertas figuras políticas. Interesante el dato que solo uno del grupo analizado obtiene un precario balance positivo de +3. Dichos formatos no son encuestas propiamente dichas, sino medidores de opinión en torno a varios personajes, generalmente públicos, que se ven como potenciales candidatos para las elecciones próximas.

El eje de la dinámica no es preguntar por quién votaría, sino medir el conocimiento público que tienen las personas sobre determinados nombres, indicando si su opinión es favorable o no, lo que arroja un índice porcentual positivo o negativo, después de deducir ambas variables. Este ejercicio es importante por lo que ya he afirmado en varias ocasiones: Desde Vinicio Cerezo (ganador en 1985) ningún presidente ha ganado con menos del 70% de conocimiento público (no refleja intención de voto).  El actual presidente es una excepción, producto de una serie de factores ajenos a él, que decidieron en último momento su triunfo. Para el efecto, doy un dato vital de la última elección: Una tercera parte del voto se definió haciendo la fila en la mesa respectiva del centro de votación, otra tercera parte se decidió en la semana en que se realizaron los comicios y, el porcentaje restante, fue una decisión tomada con antelación (datos de @Luisassardo).

Sé que muchos se resentirán por la mención de tanto impresentable y la omisión de quienes ellos quisieran, pero lamentablemente, no aparecen dentro de los más reconocidos y los datos, son los datos. No está demás indicar que, en mi caso, además de encuestas y sondeos de opinión, tanto públicos como privados, recurro periódicamente a colegas y amigos, quienes también se dedican al análisis político, con el objetivo de intercambiar impresiones, opiniones, enfoques e información diversa. Por supuesto, para darle seriedad al ejercicio, se descarta de entrada, todo aquello publicado por encargo, sin sustento y/o simplemente falso.

El top 5 de los que cuentan con opinión favorable, son:

EvaluadosFavorableDesfavorableÍndice + –
Roberto Arzú35%32%+3
Bernardo Arévalo32%57%-25
Sandra Torres31%56%-25
Carlos Pineda28%32%-4
Zury Ríos25%36%-11

Lo más relevante de este cuadro es que solo un evaluado tiene un escaso saldo positivo, indicador resultante después de restar lo favorable y lo desfavorable. Lo anterior, evidencia el grado de precariedad en la oferta. Por cierto, como dato curioso, de ganar este personaje, sería la primera vez en la historia que el hijo de un expresidente, le entrega la banda presidencial a otro hijo de expresidente. Repito, no se trata de tener preferencias o de impulsar a alguien en particular, sino basarse en la data disponible.

Así mismo, se confirma el declive de la imagen presidencial, quien empata con Sandra Torres en el índice negativo con un -25. En el cuarto y quinto lugar, cierra Carlos Pineda y la hija del general Ríos Montt.

Del puesto 6 al 15 aparecen:

EvaluadosFavorableDesfavorableÍndice + –
Edmond Mulet17%26%-9
Ricardo Quiñónez14%21%-7
Karin Herrera13%20%-7
Nery Ramos13%18%-5
Armando Castillo12%20%-8
Roberto González11%17%-6
Consuelo Porras11%59%-48
Samuel Pérez10%17%-7
Rafael Curruchiche9%46%-37
Anabella Giracca9%16%-7

Cabe destacar que los personajes más repudiados de toda la lista (27 evaluados) son: La doña de Gerona con -48, así como su brazo derecho, Curruchiche con -37. Llama la atención el bajo rechazo al alcalde Quiñónez, pero ya en otros espacios hemos analizado ese fenómeno; solo mencionaré los siguientes factores: 40 años de gestión arzuísta, la 21k, el Transmetro, programas y distractores sociales, entre otros.

Similares personajes confirman su poca relevancia nacional: la actual vicepresidenta Karin Herrera, el presidente del Congreso Nery Ramos, Armando Castillo del partido VIVA, Roberto González (alias Canela) y la actual ministra de Educación. No mencionaré al resto de la lista por su baja incidencia.

Indudablemente, los porcentajes pueden variar de aquí a junio de 2027 e incluso, en la práctica, hoy en día, podrían diferir, aunque no significativamente. Nos guste o no, la realidad es implacable y aunque quisiéramos que nuestro personaje favorito apareciera arrasando, resulta que más allá de nuestro círculo social o comunitario, no es percibido o la percepción resulta muy baja.

Me permito dar una proyección muy general y personal de lo que creo que pasará: Si las elecciones fueran este fin de semana, no tengo dudas con respecto al ganador del primer lugar y que aparece en el listado de marras con el único saldo positivo, precario, pero al final positivo. Respecto de este personaje debo resaltar tres elementos (no los únicos) que lo han hecho subir como la espuma en redes, espacio que ahora se define como el de mayor incidencia.  En primer lugar, el equipo que está detrás, parece haber logrado borrar la memoria nefasta que pesaba sobre él, su padre y el resto de su familia; hoy en día pareciera que las decenas de factores que le generaban un techo de cristal muy delgado, se han ocultado. En segundo lugar, la penetración de sectores que antes le eran antagónicos (izquierdas y progres) ahora resulta muy común que, en los chats de personas de estos grupos, reproduzcan sus vídeos con la frase: “…Sabemos que es un tal por cual, pero escuchá lo que dice”.  Y finalmente, el control de sus adicciones (no solo licor) lo muestran con otro semblante, más lúcido y con capacidad para aprenderse las narrativas que le elaboran y hacerlas parecer naturales. A esto, debemos aunar la calidad técnica de sus productos audiovisuales.

En cuanto a Pineda, creo que los gringos lo bajarán de la moto antes que entre a competir (al final ellos son los principales patrones, junto al narco y las élites locales). Respecto a la doña, seguro estará en la final, siendo, nuevamente, la que no gana, pero que nunca pierde. Ahora bien, se empiezan a escuchar voces, cada vez más insistentes, sobre que, en esta ocasión, sería su última participación. Hay quienes dicen (y hablo de gente informada): “ya hemos probado de todo, qué más da darle al fin la oportunidad a la señora”.

Sin perjuicio de la pobreza en las credenciales académicas, éticas, culturales y de trayectoria política de la gran mayoría de evaluados, al final, sea cual sea el resultado en dos años, el pato lo pagaremos todos, pues está comprobado que no son las personas sino EL SISTEMA.


LEE ADEMÁS: