- La Copa Mundial de Fútbol 2026 es un evento histórico por su escala y formato, pero enfrenta importantes retos: desde condiciones climáticas extremas, coordinación multinacional, desafíos legales y de derechos humanos, hasta presiones en seguridad y sostenibilidad ambiental.
Superar estos obstáculos será clave para que el torneo pueda celebrarse con éxito y dejar un legado positivo.
1. Calor extremo y riesgos climáticos
Durante la Copa Mundial de Clubes 2025 en EE. UU., se registraron temperaturas de hasta 104 °F (≈40 °C), lo que evidenció los peligros del clima veraniego en sedes candidatas a acoger el Mundial.
Expertos advierten que en estadios como los de Atlanta o Dallas, la temperatura con bulbo húmedo puede superar los niveles considerados seguros para la actividad física.
La expansión del torneo a 48 equipos y 104 partidos complica todavía más el calendario y hace difícil evitar partidos en las horas de mayor calor.
2. Coordinación multinacional y logística compleja
Es la primera vez que el Mundial se celebra en tres países (EE. UU., Canadá y México), lo que multiplica los retos en logística, seguridad y transporte transfronterizo.
La capacidad aeroportuaria estadounidense y los sistemas migratorios están en alerta: se teme que millones de visitantes generen retrasos masivos y colapsos en infraestructuras.
Fanáticos de países como Argentina, Brasil o México enfrentan esperas de hasta 700 días para tramitar visas, poniendo en riesgo la asistencia internacional.
3. Derechos humanos, laborales y transparencia
Grupos exigen que se respeten los derechos laborales, se transparente el gasto y se eviten abusos en la construcción y operación del torneo.
En México, la FIFA fue acusada de impedir una inspección laboral en el Estadio Azteca, lo que generó alarmas por posibles condiciones precarias o explotación.
Las tensiones en torno a políticas migratorias en EE. UU. —como detenciones, arrestos de migrantes o discriminación— podrían entrar en conflicto con los valores inclusivos que promueve FIFA.
4. Seguridad, control de multitudes y violencia armada
Estádios en EE. UU., como los del fútbol americano, estuvieron marcados por incidentes graves como el Astroworld y disturbios en eventos previos, lo que pone en perspectiva la seguridad para el Mundial.
El alto índice de violencia armada en EE. UU. genera preocupación por la protección de fan zones y zonas circundantes en el evento más mediático del planeta.
Además, la coordinación de seguridad entre múltiples jurisdicciones nacionales y federales complejiza aún más la planificación preventiva.
5. Huella ambiental y sostenibilidad cuestionada
El torneo tiene una proyección de emisiones de gases de efecto invernadero de más de 9 millones de toneladas de CO₂, casi el doble del promedio de los cuatro Mundiales anteriores, debido a los desplazamientos aéreos entre sedes.
Las críticas también señalan que la ambición económica del evento contradice los compromisos de FIFA de reducir emisiones y operar con neutralidad climática.