- La misión internacional sigue el trabajo que realizan las comisiones de postulación para magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y de salas de apelaciones.
En medio de un clima de incertidumbre en torno al trabajo de las comisiones de postulación para magistrados del Organismo Judicial (OJ), la misión de observación del proceso de la OEA emitió un comunicado en el que «expresa»saluda avances» por haber mantenido la sede de la Universidad Rafzael Landívar para la deliberaciones, aunque anticipa el peligro «conflicto de intereses» más adelante.
La Misión destaca que la decisión de continuar trabajando en la URL «ello se «garantiza un entorno que cumple con las condiciones de seguridad y logística necesarias para el trabajo de las comisiones y la adecuada custodia de los expedientes».
Aunque la misión no hace referencia a ello, a lo interno de las comisiones hay inquietud porque como parte de la decisión de trabajar en la URL, se acordó que la votación final se hará en el Congreso de la República, en donde podrían ser objeto de presiones y hasta poder impedir la o las sesiones por medio de acciones de sabotaje.
La Misión nota «el corto plazo de cuatro días para la entrega de expedientes y hace un llamado a todos los profesionales del derecho con idoneidad y honorabilidad a participar activamente en este proceso de postulación. Solo con la participación de los mejores profesionales éticos se puede garantizar una conformación de Cortes que garantice la independencia judicial, un prerrequisito esencial para la protección de los derechos humanos y un fundamento de la democracia representativa».
A su vez, la Misión señala la importancia «de que este proceso refleje la diversidad y representatividad de la sociedad guatemalteca, por lo que hace llamado especial a la participación de mujeres y miembros de los pueblos indígenas».
La Misión alerta sobre «el potencial conflicto de interés que se presentaría si los miembros de las comisiones postuladoras participan en un proceso u otro como candidatos. En procesos anteriores se han identificado situaciones de cruce o intercambio de votos en los que distintos miembros se beneficiaron como candidatos dada su condición de comisionados en alguna de las comisiones de postulación. La Misión espera que no se presente este tipo de conflicto y acude a la honorabilidad de los miembros de las comisiones ante situaciones como ésta».
En las primeras semanas del trabajo de las comisiones de postulación se pudo observar que forman bloques en cada una de ellas los magistrados (del CSJ y de salas) con algunos de los comisionados del Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala (CANG).
Se pudo observar que la intención de este grupo era el de retardar el proceso. Incluso Oscar Cruz presidente de la CSJ, denunció en entrevista con la prensa, que los magistrados intentaban prologar su período como magistrados más allá del 13 de octubre, fecha establecida constitucionalmente para realizar el cambio en ambas cortes.
Se espera también que haya varios amparos y acciones «legales» de parte de fuerzas antidemocráticas, con el fin de que el proceso se vea interrumpido.
La Corte Suprema de Justicia y las salas de apelaciones se encuentran virtualmente cooptadas por el poder político desde el período de Jimmy Morales, cuando se perdió totalmente la independencia de la justicia en Guatemala, como lo han señalado organismos internacionales y países amigos de guatemala, que siguen con preocupación los esfuerzos de los grupos antidemocráticos.
El presidente Bernardo Arévalo fue quien solicitó la presencia en Guatemala de la misión de observación de la OEA, por considerar que sin una justicia independiente no se puede llevar a cabo una eficiente lucha anticorrupción, como la que él prometió en campaña electoral.
Arévalo considera que el Ministerio Público (MP), con Consuelo Porras a la cabeza, es la «punta de lanza» de «los corruptos y antidemocráticos» que no quieren que su administración tengan éxito.