Aunque se reportan combates y ataques rusos, la resistencia ucraniana es firme
Las conversaciones, organizadas por el presidente turco Tayyip Erdogan en Estambul, comenzaron justo cuando la invasión de Rusia se detuvo en la mayoría de los frentes por una fuerte resistencia, con los ucranianos recuperando territorio en contraataques.
Ocurren en un contexto que incluye el hecho de que los civiles están atrapados en ciudades sitiadas.
Las conversaciones del martes fueron las primera cara a cara entre las partes desde el 10 de marzo.
Ucrania propuso adoptar un estatus neutral pero con garantías internacionales de que estaría protegida de ataques.
Las propuestas incluirían un período de consulta de 15 años sobre el estado de Crimea anexada por Rusia y podrían entrar en vigor solo en caso de un completo alto el fuego, dijeron los negociadores.
El principal negociador ruso, Vladimir Medinsky, dijo que examinaría las propuestas ucranianas e informaría sobre ellas al presidente Vladimir Putin. Los negociadores ucranianos pidieron una reunión entre Putin y el presidente Volodymyr Zelenskyy.
Durante las conversaciones, un asesor de Zelenskyy, Mykhailo Podolyak, dijo que se estaban discutiendo garantías de seguridad y condiciones para un cese al fuego para resolver problemas humanitarios.
El multimillonario Roman Abramovich, uno de los oligarcas rusos sancionados por Occidente por la invasión de Ucrania por parte de Moscú, fue visto asistiendo a las conversaciones de paz.
Una transmisión de televisión presidencial mostró a Abramovich sentado junto al portavoz presidencial turco Ibrahim Kalin y escuchando el discurso del presidente Erdogan a los delegados rusos y ucranianos. No obstante, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que Abramovich no era un miembro oficial de la delegación rusa en las conversaciones con Ucrania en Turquía, pero que estuvo presente en ellas.
El ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, hablando con los funcionarios en una reunión televisada reafirmó que se habían completado las tareas principales de la primera fase de la operación militar de Rusia en Ucrania.
La agencia Reuters informó sobre convoyes militares con marcas ‘Z’ que circulaban en una carretera que conduce a la sitiada ciudad portuaria de Mariúpol, en el sur de Ucrania.
Reportes desde Ucrania
El alcalde de Mariúpol, Vadym Boichenko, dijo el lunes que 160.000 civiles seguían atrapados en la ciudad en el Mar de Azov sin calefacción ni electricidad después de semanas de bombardeo ruso.
En la ciudad sureña de Mykolaiv, un misil abrió un agujero en el edificio administrativo principal. Las autoridades dijeron que al menos siete personas murieron y 20 resultaron heridas, incluidas 18 rescatadas de entre los escombros por rescatistas.
Rusia, que envió decenas de miles de tropas a Ucrania el 24 de febrero, niega haber atacado a civiles y culpa a Ucrania por el fracaso reiterado en acordar corredores seguros para los civiles atrapados.
Las fuerzas rusas han atacado los puertos del sur de Ucrania, incluidos Kherson, Odesa, Mykolaiv y Mariúpol, mientras intentan aislar a Ucrania del Mar Negro y establecer un corredor terrestre desde Rusia hasta Crimea, la península que Rusia capturó en 2014.
Los pedidos de Zelenskyy
En una súplica apasionada al parlamento danés, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, dijo a Europa que debe endurecer las sanciones contra Rusia, incluido el bloqueo del comercio, la interrupción de la compra de petróleo y el cierre de puertos a los barcos rusos.
Más de un mes después del inicio de la guerra, el mayor ataque contra una nación europea desde la Segunda Guerra Mundial, más de 3,9 millones de personas han huido al extranjero, miles han resultado muertas y heridas, y la economía de Rusia se ha visto afectada por las sanciones.
Algunos refugiados ucranianos han decidido emprender el viaje de regreso a su país, donde dejaron atrás a sus seres queridos.