La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó este martes 16 de marzo que el volcán de Pacaya mantiene alta actividad, lo cual ha generado columnas de ceniza y gases de hasta cuatro mil metros sobre el nivel del mar.
“Las partículas se dispersa entre 30 y 45 kilómetros hacia el oeste y noroeste del cono volcánico. Se recomienda a pobladores de comunidades cercanas atender las indicaciones de autoridades locales por si fuera necesario evacuar de forma preventiva”, indicó la Conred.
Añadió, además, que la variabilidad del viento a diferentes alturas puede dispersar ceniza en otras direcciones.
No da tregua
Desde principios de febrero, el volcán Pacaya entró en erupción y desde entonces no da tregua a los residentes de las comunidades aledañas, quienes sufren por la caída de ceniza y viven con temor por los constantes retumbos y sismos.
En los últimos días, vecinos del coloso han reportado la expulsión de ceniza y lava por el flanco sur del volcán, y muchos lo asocian con la formación de un segundo cráter; sin embargo, autoridades del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) descartan esa posibilidad, pero detallan que, debido a la actividad del coloso, se formó una fisura por donde expulsa material.
De acuerdo con el ente científico, en las últimas 24 horas, el volcán de Pacaya continúa presentando pulsos de incremento de corta duración que han favorecido a la formación de columnas de gas y ceniza entre 1 y 2 km de altura.
“La dirección del viento predomina del este, lo cual favorece a la caída de ceniza en las comunidades ubicadas en el flanco noroeste, oeste y suroeste del volcán, pero se debe considerar que la variabilidad del viento a diferentes alturas puede dispersar la ceniza en otras direcciones”, informó.
Añade que se reportan “sonidos similares a los de una turbina de avión de débiles a moderados” y que “la actividad explosiva de tipo estromboliano en el cráter Mackenney se ha registrado de forma muy esporádica”; además, refiere que “la actividad efusiva continúa, lo cual ha permitido que el flujo de lava en el flanco sur siga activo, con longitudes entre mil y mil 700 metros”.
Ante ello, el Parque Nacional Pacaya continúa cerrado por el peligro de avalanchas, explosiones, quemaduras o daños mayores. Además, el Insivumeh ha recomendado a la Dirección de Aeronáutica Civil tomar las precauciones con el tráfico aéreo en el sector de los volcanes por presencia de ceniza.