El museo del antiguo campo nazi de la muerte Auschwitz-Birkenau, cerrado desde mediados de marzo por la pandemia de coronavirus, pidió el miércoles ayuda financiera.
En 2020 se celebró el 75 aniversario de la liberación de Auschwitz-Birkenau, convertido en símbolo de todos los campos de exterminio donde murieron cerca de la mitad de los 6 millones de judíos asesinados durante el Holocausto, así como centenares de miles de personas de otros orígenes.
«Pedimos ayuda financiera por parte de todos los que consideran necesario preservar la memoria», se lee en un comunicado publicado en la web del museo.
«El presupuesto de 2020 se hundió», dice el texto, pese al «apoyo particular» del ministerio polaco de la Cultura y la Fundación Internacional Auschwitz-Birkenau que permite mantener el empleo y continuar las obras de mantenimiento de los vestigios de este antiguo campo de la muerte.
Sin embargo el museo no tiene fondos para sus actividades educativas, editoriales y para sus exposiciones.
El memorial de Auschwitz-Birkenau está cerrado desde el 12 de marzo y no podrá abrir hasta principios de julio según su web.