Guatemala espera volver a recibir turistas extranjeros a partir de 2021, cuando se restablezcan las conexiones aéreas y se reabran las fronteras cerradas para contener la propagación de la COVID-19, informó este jueves un dirigente del sector.
«Creemos que vamos a empezar a ver el turismo internacional llegando al país por el segundo trimestre del año 2021», dijo a periodistas Mynor Cordón, titular del Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat), en una conferencia virtual para detallar los planes de reactivación del sector, golpeado por la pandemia.
Su proyección se basa en el restablecimiento de la conectividad aérea regional en los próximos meses.
Cordón señaló que para atraer nuevamente a los turistas internacionales, en agosto próximo el gobierno guatemalteco iniciará una campaña en medios de comunicación en el extranjero.
Entre los principales atractivos turísticos de Guatemala se encuentra la ciudad colonial de Antigua (suroeste), el parque arqueológico Tikal (norte) y el paradisíaco lago de Atitlán (oeste).
Guatemala mantiene cerradas sus fronteras a los extranjeros desde marzo como medida para evitar los contagios de COVID-19, que superan los 2,200 casos en el país centroamericano, entre ellos 44 muertos y 159 recuperados.
El Inguat tenía previsto que este año llegarían al país 2.6 millones de turistas extranjeros, pero por la pandemia la proyección se redujo 67%.
Además, se esperaban ingresos por 1,263 millones de dólares pero la proyección es de 68% menos.
Guatemala recibió en 2019 2.5 millones de turistas extranjeros que dejaron ingresos por 1,249 millones de dólares.
Cordón detalló que inicialmente la prioridad será fortalecer el turismo interno, por lo que si las medidas restrictivas en marcha se flexibilizan a partir del 15 de julio, se abrirán gradualmente los sitios turísticos con protocolos sanitarios rigurosos.
«Básicamente estamos trabajando en la reactivación del turismo interno que tiene un peso muy grande en el segmento de viajes», indicó Cordón.
Además del cierre de fronteras, Guatemala mantiene desde hace dos meses un toque de queda parcial.