La policía de Canadá anunció el lunes que realizará un estudio psicológico del autor de la mayor masacre en la historia del país, para intentar descubrir qué lo llevó a matar a 22 personas sin razón aparente antes de ser abatido.
Esa autopsia psicológica, normalmente realizada a suicidas, ayudará a «entender las razones por las cuales cometió esos actos de violencia» , dijo en una nota la Gendarmería Real de Canadá (GRC).
«Se trata de analizar su personalidad, su comportamiento pasado y sus relaciones con los demás, especialmente hurgar en sus asuntos e interrogar a su entorno», detalló la fuerza.
El autor de la matanza cometida entre el 18 y el 19 de abril fue un técnico dental de 51 años que sembró de terror y sangre la apacible región de Nueva Escocia tras una violenta disputa y agresión a su cónyuge, quien pudo escapar.
Ese incidente «podría ser el catalizador de la cadena de acontecimientos», había comentado la policía.
El atacante fue abatido tras una cacería de más de 12 horas por decenas de kilómetros durante la cual incendió varios edificios y mató a 22 personas. El hombre conocía a varias de las victimas, pero las razones por las que las mató son un misterio.
El hombre, identificado como Gabriel Wortman, circuló disfrazado de policía en un auto parecido a los que usa la GRC. En su mortal periplo llevaba dos pistolas y dos fusiles semiautomáticos. Tres de las armas fueron compradas ilegalmente en Estados Unidos, según la policía.
Tras esa masacre, el gobierno canadiense prohibió las armas de asalto en el país.