Unos 700,000 menores en Italia tienen dificultades alimentarias debido a la crisis generada por el nuevo coronavirus que ha afectado a sus familias y ha ocasionado el cierre de colegios y de restaurantes escolares, según Coldiretti, principal organización agrícola del país.
«El número de menores de menos de 15 años que necesita ayuda para tener leche o comer ha pasado a 700,000», indica Coldiretti en un comunicado publicado el domingo con motivo del Día de la Madre en Italia.
«La situación crítica vinculada a la pandemia se ha agravado en muchas familias por el cierre de escuelas y de los restaurantes escolares que eran la ocasión para muchos de garantizar a sus hijos una comida caliente», agrega el sindicato agrícola.
Entre los nuevos pobres figuran «las familias de los que han perdido su empleo temporal, los pequeños comerciantes o artesanos que han tenido que cerrar, las personas empleadas clandestinamente que no reciben subvenciones especiales o ayudas públicas y no tienen ahorros, así como numerosos trabajadores temporales o que realizan actividades ocasionales», precisa Coldiretti.
Las dificultades están extendidas por toda la península, pero las regiones más afectadas están en el sur. El 20% de los pobres se encuentran en Campania, el 14% en Calabria y el 11 en Sicilia.
Coldiretti también anunció en abril un encarecimiento de los precios de las frutas (+8,4%), legumbres (+5%), leche (+4,1%) o incluso la charcutería (+3,4%).
Además de la «carrera por las compras» por la cuarentena, estas subidas de los precios de los alimentos están relacionadas con el cierre de bares, restaurantes y mercados locales en muchas regiones, dice Coldiretti.
La pandemia ha suscitado una ola de solidaridad en Italia donde se han activado centenares de asociaciones de ayuda en todo el territorio.
Cerca de 4 italianos de cada 10 (39%) han asegurado que participan en actividades de solidaridad a través de donaciones en metálico o paquetes de alimentos, según una investigación de la organización agrícola.