Los Angeles Lakers están en conversaciones con autoridades de la ciudad para tener la posibilidad de reabrir su centro de entrenamiento antes del 15 de mayo, cuando California decidirá terminar o extender la cuarentena por el coronavirus, según dijo este martes el canal ESPN.
El gerente general del equipo, Rob Pelinka, y el entrenador Frank Vogel, mantuvieron una conferencia telefónica con sus jugadores para hacerlos conscientes de las medidas de precaución que deben observar cuando puedan regresar a sus centros de capacitación.
California tiene otras tres franquicias de NBA con Los Angeles Clippers, Golden State Warriors y los Sacramento Kings.
Estas medidas incluyen tomar la temperatura de los jugadores cuando llegan al sitio y la luz verde de un profesional de la salud para tener acceso al edificio.
Todo el personal de atención a los jugadores deberán usar una máscara y guantes y los que tengan que estar dentro de la cancha como apoyo también zapatillas esterilizdas.
El equipo proporcionará a los jugadores un ´kit´ de protección individual y, si un jugador deja su máscara en casa, se le proporcionará otra a su llegada al estacionamiento de las instalaciones.
Se proporcionarán también lugares para lavarse las manos. La sala de pesas se renovará para permitir más espacio entre los equipos.
Las sesiones individuales, limitadas a cuatro jugadores a la vez por la NBA, estarán sujetas a una planificación estricta, con horas de entrenamiento asignadas para evitar el hacinamiento.
Las sesiones individuales serán voluntarias, pero todos los jugadores de los Lakers parecen «ansiosos» por regresar, según una fuente anónima presente en esta conferencia telefónica.
Esta iniciativa es el resultado del anuncio hecho el lunes por la NBA, que tiene la intención de permitir, a más tardar el 8 de mayo, que los jugadores vayan a las instalaciones de su equipo para realizar sesiones individuales, en áreas donde las estrictas pautas gubernamentales contra el coronavirus lo permitan.
Este primer paso hacia un regreso muy gradual al baloncesto solo prevalece para los equipos afectados por una relajación de las directivas restrictivas de su Estado.
Esto implica que no todos estarán en pie de igualdad en el camino para volver a ponerse en forma.