Un grupo de expertos de la CIDH denunció obstrucciones del gobierno mexicano y supuestos casos de tortura, además de cuestionar la actuación de fuerzas federales, al presentar este domingo su informe final sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos terminó así un año de trabajo sin que se conozca el destino de los estudiantes, desaparecidos desde la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
La misión del GIEI concluye el 30 de abril ante la negativa del Gobierno, en abierta confrontación con los expertos, a autorizar un tercer mandato. James Cavallaro, presidente de la CIDH y que recibió este domingo el informe, lamentó la actuación estatal.
La misión del GIEI culmina a pesar de que los objetivos permanecen incumplidos, principalmente lo que se refiere a la ubicación de los estudiantes, dijo Cavallaro, quien se quejó de la no asistencia de funcionarios a la presentación.
En 605 páginas, el informe critica las mecánicas de trabajo de la Procuraduría General (fiscalía), el lento sistema penal y denuncian presuntas torturas a 17 de los 123 detenidos.
El presidente mexicano Enrique Peña Nieto dijo en Twitter que su Gobierno agradece al GIEI y que la fiscalía analizará el informe para «enriquecer» su investigación.