Los niños y niñas transgénero no se sienten menos niños o niñas que los no transgénero, según un gran estudio realizado en Estados Unidos que descubrió cómo se ajustan a las normas de género.
En otras palabras, un niño trans de 10 años, por ejemplo, tratado durante nueve años como una niña debido a su sexo al nacer, se comporta como cualquier otro niño, dicen los autores del estudio, realizado por investigadores de la Universidad Estatal de Washington y publicado el lunes en la revista científica PNAS.
Los investigadores reclutaron a 317 niños trans de 3 a 12 años y 316 niños cisgénero, o sea, que se identifican con su sexo al nacer.
El objetivo era ver si los niños que hicieron la transición diferían de los niños que habían crecido toda su vida como niños o niñas, observando qué juguetes preferían, cuáles eran sus principales compañeros de juego y si su ropa era más bien masculina o femenina.
Los investigadores observaron una gran consistencia en los niños.
«Siempre hay personas que dicen que estos niños fingen o que es una fase», dice el primer autor del estudio, el investigador posdoctoral Selin Gülgöz.
De hecho, «no solo los niños transgénero tienen una identidad de género y preferencias de género coherentes con su identidad de género actual, sino que también los expresan en el mismo grado que los niños cisgénero», acota Gülgöz.
Se observó una ligera diferencia en la elección de la ropa: los niños trans tenían más probabilidades de elegir la ropa correspondiente a los estereotipos masculinos o femeninos que los niños no trans.