Desde el pasado 12 de febrero, autoridades guatemaltecas han mantenido diversas reuniones para coordinar sus acciones ante la posible llegada de una nueva caravana de migrantes procedente de Honduras, la cual se dirigiría rumbo a Estados Unidos
El portavoz del Ejército de Guatemala, Rubén Téllez, confirmó durante una conferencia de prensa que de confirmarse la fecha en que estarían ingresando esos grupos al país “se implementará la misma metodología que fue utilizada días atrás con la primera caravana”, dijo.
El 01 de octubre de 2020, el presidente Alejandro Giammattei decretó estado de Prevención en los departamentos donde se movilizaron miles de hondureños que, de forma violenta ingresaron en la frontera de El Corinto, Izabal.
En esa ocasión, el mandatario indicó que los migrantes serían detenidos y retornados a su país de origen, ya que, en el contexto de la pandemia, serían un riesgo para la salud.
Reunión
Las autoridades del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), junto al director adjunto de la Policía Nacional Civil, Edwin Ardiano, el director de Inteligencia Militar del Estado Mayor de la Defensa Nacional y funcionarios del Ministerio de Salud guatemalteco, sostuvieron una reunión para “el intercambio de información” y “exponer lecciones aprendidas de los movimientos masivos de personas que se han registrado con anterioridad”, precisó el IGM.
De acuerdo con Alejandra Mena, vocera de Migración, “tenemos información de la conformación de una caravana; sin embargo, no hay fecha para la misma, por lo que para atenderla de manera oportuna se realizan las coordinaciones para el abordaje de la misma”.
La entidad reiteró además que, según el acuerdo regional CA-4 está permitido el paso a Guatemala de salvadoreños, nicaraguenses y hondureños con un documento de identidad o pasaporte vigente, pero además todos los viajeros deben presentar una prueba negativa de covid-19.
A mediados de enero pasado, casi nueve mil hondureños cruzaron Guatemala por la vía terrestre en busca de llegar a Estados Unidos para tener mejores oportunidades de vida y escapar de la violencia.
Sin embargo, el paso de unos seis mil de los migrantes hondureños, que caminaban en caravana, fue bloqueado por las fuerzas de seguridad guatemaltecas, que los obligaron a retroceder y retornar a su país.
Los otros tres mil migrantes se dispersaron por el país y en muchos casos emprendieron el retorno voluntario a sus poblados natales en Honduras.
El Gobierno guatemalteco indicó en aquella ocasión y sostuvo este viernes que no se permitirá el paso de migrantes sin los requisitos para acceder al país.
De acuerdo con Instituto Guatemalteco de Migración, actualmente se “sostiene comunicación con autoridades hondureñas” para afrontar cualquier eventualidad.
El objetivo de los migrantes es llegar a Estados Unidos en busca de plazas de trabajo, alejados de la pobreza y la violencia que azotan el istmo centroamericano, especialmente después de la pandemia y los huracanes Eta y Iota, en noviembre pasado.
El 13 de octubre de 2018 salió la primera caravana de este tipo procedente de Honduras, con más de cuatro mil migrantes.