El 1 de octubre de 2015 los vecinos de El Cambray II vivieron una tragedia que cobró más de 300 víctimas y unas doscientas viviendas quedaron totalmente soterradas. Hoy, casi ocho meses después las víctimas sobrevivientes han visto incumplidas las promesas gubernativas y viven bajo la amenaza de perder la poca ayuda que reciben en un refugio municipal.
Este día las autoridades de la municipalidad de Santa Catarina Pinula les han informado a 32 familias afectadas que permanecen en el salón municipal, que deberán desalojarlo el 1 de julio, sin que tengan un lugar en donde vivir, porque el proyecto Mi querida familia, que se construye en San José Pinula para su traslado, ha sufrido graves retrasos, ya que había sido ofrecido originalmente para diciembre pasado, y luego se postergó la inauguración del proyecto, aparentemente, por malos trabajos realizados por las autoridades correspondientes.
La Procuraduría de los Derechos Humanos realizó este día una inspección en el salón municipal, y entrevistó a varias de las víctimas, con el fin de determinar lo que está sucediendo.
En diciembre pasado, el expresidente Alejandro Maldonado Aguirre –quien hizo la promesa de entregar las casas–, visitó el complejo en construcción, y realizó una inauguración simbólica junto al presidente Jimmy Morales, quien ha explicado que las causas del retraso y la falta de atención a las víctimas no es responsabilidad de su administración.
Otro problema que se ha visto, es que algunos de los afectados, al ver el incumplimiento de las autoridades con la entrega del nuevo proyecto, han optado por volver a sus terrenos en el mismo lugar desolado, lo que les coloca de nuevo en peligro de verse afectados por un alud.